También se atribuye esa expresión de "andar de capa caída..." a aquellos que en la época donde llevar capa espaňola era corriente, la llevaban ladeada, incluso arrastrándola e inicialmente se consideraba como un signo de mal gusto en el vestir, ser descuidado o incorrecto. Con el tiempo y el uso se ha ido modificando hasta significar estar abatido o hundido
Otra expresión, " a capa y espada" se refiere a que en los enfrentamientos, muchos espadachines utilizaban la capa como arma. O bien se la liaban en el antebrazo para parar los golpes de otras espadas o lastraban los bajos con piezas de plomo y las lanzaban como látigos buscando golpear la cara del contrario o buscando liarlas en la espada del oponente para bloquearlo y darle una estocada.
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