¿Te cuento uno de mis episodios de "bajón" así te ries un poco?
En mi caso la ruptura se dio por problemas mentales de la otra parte... Ni siquiera tuve el "desahogo" de la rabia, verás, si me hubiera puesto los clásicos cuernos yo hubiera llorado, rabiado, dado la matraca a los amigos, vuelto a rabiar y ya...
Pero lo mío fue tan tonto, tan injusto como absurdo, y se cargó una relación que hubiera podido tener futuro.
La cuestión es que las fases iniciales del duelo se estiraron más porque buscaba explicaciones donde no las hay buscaba "entender" y lo que aprendí es que hay cosas en la vida inaccesibles a lo racional, donde no hay nada que "entender". Hay que aceptar y ya está. Y eso a mi me cuesta.
En fin que un domingo sin niños sola en casa me pongo a limpiar y a escuchar música en la radio. Acabo y pienso "oye, qué bien entraría un Malibú bien fresquito astas hora..." Y me pongo un cubata y me corto un poco de jamón y queso (era verano y serían las ocho de la tarde o así )
Y esto que me pongo alegre, chateo un poco con los amigos, me hago un selfi y venga... Malibú jamón y RockFM, me echo otro cubata, hermosote esta vez. Me achispo y me doy al bailongo, ahí tranquila sola, obviamente metiendo a Bruce Springsteen a todo trapo.
Oootro cubata y ¡oye! ¡Que se me ha acabado el Malibú !
Rock&roll mediante, acabo con tres Voll Damm que había en la nevera para cuando cae mi amiga la Raquel y ¡cómo no! Alegría y música por doquier...
Me da por ponerle un mensaje al ex.
Evidentemente.
Empezó como una charla normal pero al tipo le dió por volver a echarme en cara todas las acusaciones nacidas de sus inventos... Que si yo seguía viéndome con aquel ex de hace años, que que tuviera mucha suerte, que dejara de mentir, que él iría a mi boda si eso...Me dijo cosas horribles. Y que estaba con otra mujer.
Creo que acabé mándandolo a la mierda, la verdad es que a ésas alturas, y con todo el carburante que había en el tanque no me acuerdo.
Venga, que me atizo un vaso de gin, así a palo seco.
De una botella que tenía en la nevera de hacía siglos, y que sigue ahí porque yo sola, no bebo. Y ya ves.
La cuestión es que por ésas cosas del destino y porque tiene un sexto sentido para pillarme cuando estoy en algún fregao, con ése pedazo de pedo que llevaba, me llama mi padre.
Y ahí sí. El megacataplúm y La Gran Llorera.
Pero grande eh....
Le cuento todo de cabo a rabo a mi viejo entre sonoros y mocosos buaaaaas etílicos y por supuesto, con la radio aún a tope.
Y jurándole que yo no soy así, que no se preocupe, que no ando por la vida emborrachándome y llorando por ahí... El pobre recuerdo me decía que me entendía, que era mucho lo que estoy sacando adelante yo sola, en otro país, y que todo esto era normal que me desbordara.
Se me acaba la batería, y yo sigo ahí venga llorar y bailando.
Y la radio, obvio, en plan discoteca.
En algún momento, con los pelos a lo Elena Bonham Carter, el vestido arrollado casi por la cintura y el cerebro en escabeche, me duermo. Tendida en el suelo patiabierta como el Hombre de Vitrubio, porque estaba muerta de calor, obvio.
Suena el timbre. Ladra el perro. Vuelve a sonar el timbre, irritannnte. Abro los ojos... Blanco.
Blanco, blanco... ¡Hostias, si es el techo!
Me siento, me junto con las piernas y me levanto. Veo pasar el sofá y la tele por delante de mi un par de veces.
Instintivamente me bajé el vestido y me dio una racha de pánico, ¿y si a éste loco le dió por venir a casa???
"no, no le abro ni de coña..."
Muerta del miedo y de un marco de puerta a otro, llego hasta la mirilla de un cabezazo... Miro y... Cuatro
¡Cuatroooo! Y sólo pa mi. (Parece el inicio de una peli porno ésto, pensé, pero nop.)
Y yo que no he tenido que ver a la policía EN MI VIDA más que en las series de televisión, y ahora cuatro en la puerta mi casa.
Abro la puerta.
No puedo enfocar sus caras... Uno me dice algo... Vecinos, música
Cla! ¡Mierda! Era la una de la madrugada y la radio estaba que aflojaba baldosas. Correteé como pude al salón y la apagué.
Vuelvo a salir y mi perrazo me sigue, le salta encima a uno de los maderos para jugar, otro me dice que guarde el perro.
Empujo el perro, cierro la puerta... Con las llaves dentro.
Miro al poli que tengo más cerca, me apoyo en la barandilla de la escalera, me siento en el suelo y suelto LA GRAN LLORERA 2. Les cuento lo mismo que a mi padre, que no soy así, que no me paso la vida borracha y moqueando ni nada por el estilo, pero que es que.... Es que...
Los pobres ahí, aguantandome la murga.
Qué vergüenza...tío todavía me da vergüenza cuando lo recuerdo
A uno se le ocurre por suerte preguntarme si tengo llave, y ahí espabilo y le señalo la puerta y con una cara de idiota que debe haber sido de antología le digo "del lado de dentro"...
Me abren la puerta (que sino encima hubiera acabado durmiendo en el rellano) me preguntan si estoy sola (uno se asomó a mi casa... no sé tal vez pensaron que podría tratarse de violencia de género o algo)
Luego se van.
Lo último que recuerdo antes de caer en coma fue que cogí el móvil, lo conecté y esperé que encendiera, para llamar a mi padre no bien pudiera y decirle que no había seguido haciendo estupideces.
Así que mi amigo, cada vez que te entre un "bajoncito" de éstos, googlea Elena Bonham Carter, ponle mentalmente un vestido corto y recuerda mi historia
Pd·: no, no me volvieron a dar bajones de ése calibre y no...no volví a beber y bailar Rock&roll sola
Tampoco volví a tener contacto con el ex. A los dos días bloquee todos los accesos.
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