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Creo que haces muy bien en acudir cuando tu madre se encuentra mal. No deberías dejar de hacerlo nunca y no entiendo la frialdad con la que tu mujer trata el tema.
Por otra parte y con tantos años de convivencia, puedo entender que una persona con un carácter más reservado y disciplinado se pueda cansar del "bromista de la casa". Hay una clara incompatibilidad de carácter. Lo que no sé es cómo habéis estado tantos años juntos.
Si ella te ha "invitado" a irte con tu madre, a su casa, te está dando pistas...
Como te han dicho antes, "hay vida más allá del matrimonio". Creo que sería conveniente plantearse la separación. Sería un alivio para los dos.
No es justo que tú reprimas tu carácter por estar con una persona así, ni que ella no se encuentre en tí. Sin motivación es difícil mantener una convivencia ni mucho menos un amor que brilla por su ausencia.
Date y dale la oportunidad de una vida mejor, cada uno por su lado.
Mucho ánimo!!
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