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Pues claro que no son cuernos, mujer. Es sólo el desahogo de una tensión física que no tiene nada de malo. No hagamos dramas de lo que no tiene la más mínima importancia. Te has acostado con tu ex y punto, un ratito de placer y a otra cosa, mariposa.
Eso sí, no se te ocurre decírselo a este otro chico que te gusta, porque con ello no conseguirías nada y es más que probable que le moleste. No te olvides que las personas, nos guste o no, tenemos un ego que nos lleva a ser posesivos y no querer compartir nunca aquello que consideramos nuestro, y aunque él y tú todavía no hayáis formalizado nada, podría ser que él ya te vea como algo suyo y no le gustara que otro usufructuase su "propiedad". Mejor por tanto callar. De hecho, las palabras sólo deben hacerse fluir cuando mejoran al silencio, y en este caso no sólo no lo mejoran, sino que posiblemente lo empeorarían.
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