En efecto Cloudy, las leyes que he enunciado antes protegen a las menores de los adultos depravados, pero no les protege de otros menores. Y hay menores que son absolutamente desalmados y con muy mala idea, por ejemplo, la pobre Marta del Castillo, creo que excepto su novio, los demás cómplices eran todos menores de edad, y mareando la perdiz todo lo que les da la gana, riéndose de policías, jueces y padres.
Ya está bien de criminalizar a los adultos
|