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No es bueno que seas tu quien pague esas sesiones con un terapeuta. Es asumir una obligación y una responsabilidad que no te corresponde. Si realmente quisiera ir a terapia ella misma haría lo posible por conseguir la manera de ir (trabajar, ahorrar en otras cosas, pedir ayuda de familiares, gestionar alguna ayuda pública, etc.).
Esas responsabilidades se asumen por un familiar cercano (padres, hijos, hermanos) o por una pareja de años o con quien se conviva, pero no por una persona a la que realmente apenas estás conociendo. La ayuda que le prestes no debería ser económica.
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