Pues no. Nunca me ha llamado la atención.
En toda mi vida, habré trasnochado como unas 10 veces más o menos. Por probar e intentar que me gustara. Y la verdad, no me atrae.
Cuando salgo, prefiero la tarde. Algo mucho más tranquilo que los pubs nocturnos y discotecas. En primer lugar, mis oídos lo agradecen. Y en segundo lugar, se puede conversar.
|