Si tú seguías con tu esposa, tu amante era libre de salir y/o emparejarse con todos los tipos que se le apetecieran, te caigan bien o mal y sin darte explicación alguna. Cuando entiendas y aceptes que no puedes pedir a los demás lo que tú mismo no ofreces, se te hará la carga más liviana.
"Devastado" dices... y por qué? porque ya no tienes a tu disposición a dos mujeres, sino a una?
si hubieras querido a tu amante, pues te habrías separado, pero sólo la querías para pasar el rato, así que ahora a apechugar si se ha ido con otro. Era lo normal si es una mujer tan guapa e inteligente como dices, no? si tan inteligente es qué sentido tenía quedarse anclada en un tipo (tú) que no le ofrecía nada más? No me parece que la quieras mucho cuando piensas más en tu felicidad que en la suya, la verdad.
Lo de los hijos colaría hace 30 años, pero a día de hoy hay miles de personas cansadas de sus matrimonios que se separan y rehacen su vida.