Cita:
Hace aproximadamente un año me empecé a confiar, pasábamos poco tiempo juntos por tema de estudios y yo la fui dejando de lado por estar con el móvil, ademas dejé de cuidarme, afeitarme, vestir bien, engordé, deje de tener ganas de hacer cosas, perdí mi alegría, en resumen, me metí en un pozo enorme y ella intentaba que hiciéramos cosas, saliendo, viajes etc y yo siempre refunfuñaba, me veía muy agobiado en general y no tenia ganas de hacer nada, creo que me olvidé de mi evolución personal una vez habiendo conseguido que ella madurara y tuviese claras las cosas.
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Por lo que has contado en tu historia, ya estabas sumido en un estado depresivo mucho antes de la ruptura, por lo que entiendo que lo que te está pasando ahora es un problema inherente a ti y que no tiene relación con tu proceso de duelo. Puede que la ruptura haya intensificado está situación, pero no la ha provocado.
La rutina, la desmotivación, la dependencia, el exceso de tiempo libre, la carencia de proyectos propios, la falta de cambios y estímulos son las causas más comunes de los estados depresivos, diría que revises todas estas cosas y veas las que tengan mayor relación con tu situación del último año.