Lo he estropeado todo con él

Iniciado por Elocin

A mi me huele todo mal.

Vale que tú te estés tomando las cosas quizás demasiado a la tremenda, más que nada por el tiempo que os lleváis conociendo, que es poco, y que habíais dicho de ir sin prisas.. Pero, entiendo que sobretodo al principio es cuando más ganas hay.

Mira, yo no se hasta qué punto te compensa que una persona sea tan fría y reservada.. Y mi impresión es que ha usado su "comportamiento" tachándolo de habitual, como red de seguridad para sacarlo a relucir cuando justamente tengas la necesidad de reclamar algo, para que encima después te sientas culpable de haber pedido explicaciones ante cosas que no son demasiado normales, y menos al principio de una relación.

Creo que ha estado usando excusas, y no se qué clase de empleo le lleva a mantener discusiones a las tres de la mañana. De todas formas eso es lo de menos (y recomendaría encarecidamente pasar de mirar estados, horas, conexiones... porque nunca aportan nada bueno).

Resumiendo, no se si tu amigo ha dicho las cosas así porque es su opinión, o buscando algo más de ti.. Pero yo estoy deacuerdo y no quiero nada contigo :P

Este tipo no merece la pena, y si en menos de un año ya andamos con tonterías de "no tengo ganas de hablar", "no quiero profundizar", "igual me voy de viaje por el mundo".. Pues muchacha, no merece la pena llorar y sufrir. Y menos por alguien incapaz de darte un mínimo de explicaciones, o ser al menos suave al dar sus contestaciones.

Iniciado por Harvey

Sí, si había alguna posibilidad de que lo vuestro saliera adelante lo has estropeado, ningún hombre en su sano juicio querría algo con una mujer que se comporta como tú lo has hecho.

Él ha sido sincero contigo y tú solo tenías dos opciones, aceptar sus condiciones o no, dependiendo del interés que tuvieras en él.

No has respetado su espacio ni su ritmo, lo que está mal, pero es que además no era nada tuyo, lo que está aún peor.

La buena noticia es que si aprendes de esta experiencia no volverás a cometer el mismo error, respetarás los tiempos de la persona que quieres conocer y, si esos tiempos no van contigo, estás en tu derecho de querer los tuyos propios, cambiarás los llantos, el acoso y reptar por respeto hacia los demás, dignidad hacia ti misma y madurez para rechazar lo que te ofrecen cuando no es lo que tú quieres.