No niego que tuviste una juventud penosa, entre otros motivos, debido al divorcio de tus padres. Pero cometiste un error garrafal casándote con una mujer que no estaba preparada para el matrimonio, pues arrastraba secuelas de su fracaso anterior. Aparte que ella nunca te quiso lo suficiente y pese a todo tienes una hija con ella. Porque me parece demasiada casualidad que los problemas entre vosotros comenzaran nada más nacer vuestra hija. Si es tal como lo cuentas, no me cabe duda que solo te quiso para ser madre, pero una vez que ella logró su objetivo tú ya eras un estorbo
Y no tenías que haberle suplicado nada. Desde el episodio de la cazuela, el matrimonio tenía que haberse cortado de raíz, aunque no le hubieses dado "accidentalmente". Aquello ya demostraba de pleno que no estabais hechos el uno para el otro. Claro que los divorcios con descendencia por medio son bastante más contenciosos, pero vosotros no podéis continuar juntos porque no os amáis, por lo menos ella a ti
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