Con el tiempo aprendí, que hay que creer en hechos, no en palabras.
Que grandes amigos pueden volverse grandes desconocidos.
Aprendí que estar enamorada es la más bella de las locuras.
Que cuando las palabras fallan, la música habla.
Que no importa que tan fuerte seamos, todos en algún momento necesitamos un fuerte abrazo.
Que quien te quiere o ama te busca, te respeta, piensa en ti y lo demuestra.
Que no hay arma más poderosa que las palabras.
Aprendí que los amigos pueden contarse con los dedos.
Que sí quieres algo tienes que levantarte e ir tras ello y sobretodo he aprendido que en la vida no se trata de ser perfect@, se trata de ser feliz.
Ayer se me murió un trocito de corazón pero hoy me lo curaron los rayos del sol.
Ayer me caí hoy me vuelvo a levantar. Y lo mejor es que me levanto con la esperanza y la fé que había perdido meses atrás.
Es una mezcla de paz y tranquilidad porque sé que lo que hice, lo hice de corazón. Porque soy así y a quien no le guste, pues oye...suerte. Hoy he vuelto a sonreír porque hay más gente que me aprecia de la que me esperaba y llevan dos días levantándome y preocupándose por mí. Esas muestras de cariño totalmente desinteresadas me han llegado al alma.
Hoy una sonrisa se dibuja en mi cara y de pie, segura y fuerte le digo a la vida... que ¡hoy es el primer día de mi nueva vida!.
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