¿Quien ha dicho que ejercer la docencia sea como ir a la guerra?
Lo que estamos diciendo es que es una profesión vocacional que nada tiene que ver con otras, por lo tanto no es comparable con estar en una obra o con ser camarero, por ejemplo, sin menospreciar a estas profesiones ni a ninguna otra.
Yo no entiendo que decir eso sea ir en contra de otros trabajos, ni mucho menos.
Cada uno entiende lo que quiere entender, esa es otra cuestión.
Yo estaba trabajando en el campo, unas diez horas, vendimiendo concretamente, trabajo duro y realizado con unas temperaturas altísimas y me llamaron para hacer mi primera sustitución en la enseñanza.
Después de unos días, fíjaos, trabajando menos horas y se supone que en muchas mejores condiciones, yo añoraba estar en el campo.
Un colegio es un mundo que no conocemos a fondo nada más que los que trabajamos en él, y hay tal cantidad de añadidos a la docencia...
Mis hijos que me han visto siempre corrigiendo hasta las tantas, preparando clases, haciendo cursos, elaborando memorias y documentos varios...me dijeron desde pequeños que jamás elegirían esta profesión.
Yo siempre digo que fue algo vocacional, porque si no, es una profesión que quema muchísimo, porque nunca desconectas, y estás siempre en el punto de mira de padres, abuelos, jefes, inspectores, y leyes cada vez más alejadas de la realidad.
He visto como compañeros con unas cualidades muy buenas para esta profesión, se marcharon a buscar suerte en otros trabajos, y me dicen, pese a trabajar más horas, que nunca se han arrepentido de dejarlo.
Ahora bien, si solo miramos las horas que se está en el colegio y las vacaciones, entonces es una bicoca, pero eso es un espejismo...