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Antiguo 28-May-2018  
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Bueno el año pasado en octubre empecé una relación con mi ex, la cual terminó definitivamente en marzo de este año. Con todos los movimientos que hay hoy en día contra la violencia de género, es un poco más fácil darse cuenta cuando una pareja puede ser nociva. Mi ex tenía la característica de los celos y todo lo que viene acompañado de ello, como por ejemplo la desconfianza o desvalorización. Y en nuestra relación se repetía siempre el típico ciclo en el cual él me lastimaba (emocionalmente), cuando veía que yo me ponía mal hasta se arrodillaba para pedirme disculpas, yo lo disculpaba, “nos arreglábamos”, y nuevamente se repetía todo este ciclo. Pero siempre le di oportunidades porque a pesar de que me lastimaba, eran más cosas buenas que malas las que él hacía por mí. Y siempre le dije que a pesar de haber determinado que viviría con él toda mi vida, aún me costaba sostenerlo por completo puesto que era mi primer novio y no sabía si podría soportar vivir toda la vida solamente habiendo conocido a sólo un hombre. Eso lo lastimaba mucho y estúpidamente siempre me sentí demasiado culpable por aquello. Y con cada discusión que tuvimos fui perdiendo poco a poco todo lo que llevaba a conformar mi personalidad. Llegó un punto en el que mis malestares no sólo eran emocionales, sino fisiológicos. Insomnio, náuseas, mareos, sangrados de nariz, pero lo peor eran dolores de cabeza que perduraban días seguidos. Estar con él se volvió como darme la cabeza contra la pared, intentar algo que es para vivir y morir intentándolo. Y pese a que fui al médico y comencé a tratar mis malestares, tomé la decisión de dejarlo. Obviamente no fue nada fácil seguir sin él lo que me llevo a decirle que hagamos un esfuerzo por arreglar nuestros problemas.
Mientras tanto entra en la historia otra persona. Llegaba de vacaciones a mi nuevo trabajo, un compañero que aún no conocía. Desde que nos conocimos le conté mucho sobre mí. Nunca había podido hablar de mí tan repentina y libremente con alguien. Era realmente terapéutico hablar con esta persona. Yo le contaba sobre mi ex y el sobre sus historias pasadas de sus relaciones. Me encariñé mucho con este chico a medida que pasaban los días. Era un cariño lindo, no había interés. Luego llegaron los primeros días de marzo en los cuales se encuentra mi cumpleaños, a lo que mi compañero me regala un desayuno. Mi ex, con quien veníamos día a día tratando de salir adelante, ya había manifestado sospechas de mi compañero porque a veces me regalaba alfajores para merendar o desayunar, y tuvimos algunas discusiones que terminaron de hervir debido al desayuno (café con medialunas). Entonces hablé con mi compañero para saber si le sucedía algo conmigo a lo que respondió que no. Entonces esta fue la gota que rebalsó el vaso. Siendo los primeros días de marzo, terminamos definitivamente.
Pasó el primer mes, mientras con mi compañero nos conocíamos cada vez más y nos llevábamos mejor. Pronto pasaban los días y lo comencé a ver de una manera distinta. Me comenzó a interesar. Me sentí muy culpable y de hecho al principio casi lo reprimí, pero pensé: esto no es un delito, ni una infidelidad, solamente me parece un buen chico y quiero seguir conociéndolo, es algo lindo que siento, por qué debería recriminarme, eso es cruel. Justo en estas instancias se presenta nuevamente mi ex, quién enterado de esta situación perdió el control y comenzó a hacer cosas malas. Amenazó a mi compañero, molestó por mensajes a mis amigos, mostró fotos mías que eran privadas, entró alterado a mi casa y se llevó todo lo que me dio y me dejó todo lo que le di, le habló muy mal sobre mí a mi madre (quién le creyó). Le mostró una foto privada mía a mi propia madre diciéndole que yo me fui a un motel con mi compañero de trabajo, lo cual generó un gran desprecio de parte de mi familia hacia mi compañero. Y palabras que me destrozaron por completo, no solo malas palabras e insultos de todo tipo, si no que me pidió que si realmente quería hacer algo bueno por el mundo (lo cual sí quiero) debía suicidarme, me juró que si no lo hacía me haría sufrir tanto hasta que lo haga, haría que yo pierda mis amigos, mi familia y mi trabajo. Me juró venganza y me declaró odio repetidas veces. Lo sé, se comportó como un inútil o monstruo, pero soy la única persona que puede ayudarlo a ser una buena persona o a que no pierda el control. Pero mi familia me prohibió contactarme con él, creyeron que podría aparecer en cualquier momento para golpearme o matarme. Y aunque todos me decían lo mismo y no dejé de considerarlo, yo conociéndolo creí que eso era exagerado. Le hablé para contarle que me prohibieron contactarme con él por precaución y dijo que ya no molestaría más pero que yo las iba a pagar igual. Así de mal terminó eso.
Pasaron los días y cada vez disfrutaba más de conocer a mi compañero hasta que comenzó a gustarme. Luego comenzamos a salir fuera del trabajo, a reunirnos antes de entrar al trabajo para desayunar en un bar café, y nos fuimos encariñando cada vez más. Y llegaron los momentos de abrazos, y más tarde de besos. Iba todo de maravilla hasta que nuevamente aparece mi ex. Muy indecisa quise nuevamente intentar, no arreglar nuestra relación, sino terminarla bien. Nos juntamos para hablar y todo salió peor. Empecé a pensar demasiado en él, y ya no estaba lo suficientemente capaz de tomar una decisión. Fue todo muy confuso, quería mucho a los dos. Hasta que todo mi cerebro se culminó y pensé, este chico nuevo solo me gusta, en cambio al otro lo amo incondicionalmente. Terminé decidiendo, con todo el dolor del mundo dejar todo lo nuevo que tenía con mi compañero, y volver con mi ex que era lo que más feliz me hacía.
Cuestión, le dije a mi ex que volví para quedarme, que enserio no quiero abandonar devuelta, que quiero intentar hasta el final porque de verdad y enserio lo amaba con todo mi corazón. Este chico a pesar de ser un monstruo, está sumamente enamorado y no hay nada que no haría por mí. Cambió mucho estos días y solucionamos el tema de los celos, él realmente progresó e hizo grandes cambios de pensamiento, está más abierto a las discusiones y puntos de vista. Es la misma persona pero con muchos logros, y quiere seguir mejorando el resto de su vida por mí.
Y yo acá UNA COMPLETA ESTÚPIDA DEVUELTA ESTOY CONFUNDIDA NO PUEDO IR A TRABAJAR SIN VER A MI COMPAÑERO CON GANAS DE MORDERLO ABRAZARLO Y BESARLO. Ya no sé qué quiero, y necesito ayuda porque estoy lastimando personas, es muy cruel. Por favor, agradecería mucho una ayuda.
 
 

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