Carta de despedida

jumma

Hola a todos, tras 3 meses de duelo, por fin he escrito una carta de despedida para mi ex. El domingo, cuando esté sola, la leeré en voz alta, la quemaré y tiraré las cenizas junto con todos los regalos y objetos que tengo guardados en el armario. Quiero hacer este ritual para ayudarme a soltar, que me está costando hacerlo del todo. La carta es la siguiente

"Por fin me decido a escribirte esta carta de despedida. He tardado en dar este paso porque quiero que sea algo definitivo. que con esta carta termine de soltar el último lazo que aun me ata a tu recuerdo. He pasado unos meses de duro trabajo de duelo. De reflexión, de perdón. De comprender qué ha pasado y recolocarlo todo en su sitio. De leer libros, foros, documentos. De hablar con amigos, de ponerte verde, de escribir, meditar, rezar, llorar, dar gracias, y de volver a cagarme en ti. De sentirme culpable, de sentirme una mierda por cómo te fuiste. Por la manera de subirme al cielo y después, darme la patada.

Si tuviera que volver atrás, probablemente no te habría hecho ni caso, ni habría empezado nada contigo, aunque si que es verdad que ha sido una experiencia de la que he aprendido mucho. Desde que te conocí he cambiado, he madurado. Soy otra persona.

Llegaste a mi vida cuando estaba totalmente destrozada. Hacia pocos días que había terminado una relación en la que había sido maltratada y tenía la autoestima por los suelos. Te colaste como un huracán y me arrollaste. No me respetaste, te encaprichaste conmigo. Desde el principio te decia que no estabas enamorada. Yo era tu juguete, tu ilusión y fuiste a por mi. ¿Sabes? Nunca me gustaste, nunca me atrajiste. Me enganché a ti porque cubrías que vacío que mi anterior ex me dejó. Me hacías compañía, me escuchabas. Al principio me sentia bien, me sentía valorada, aunque en el fondo, sabía que todo era una mentira, que era una ilusión, una fantasía a la que me agarré como un clavo ardiendo, sabiendo en el fondo que no era real, que no iba a durar. Pero con el tiempo me olvidé y dejé de hacer caso a esa vocecilla mia que me avisaba.

Yo me equivoqué en muchas cosas. En dejarme engañar, en dejarme querer por alguien que no me gustaba. Todo por mis carencias afectivas. Cometí el error de hablarte de mi como si yo fuera un monstruo, de contarte cómo me veia, de hacerte partícipe de mi oscuridad desde el primer momento como si fuera algo intolerable, y no algo normal que absolutamente todos tenemos. Me posicioné ante ti como una enferma, como una débil, como alguien horrible a la que hay que aguantar. Te di todo el poder a ti. Te coloqué en el papel de salvadora. Y tu estabas encantada, claro. Era la única manera de poder tener una relación conmigo. Jugar ese papel. Yo adopté el rol de pobre enferma y tu la de cuidadora a la que no le importaba estar con alguien como yo. Desde esa posición empezamos el juego,

Decias que tu eras diferente, que tu podías aguantar todo pero el problema no fue que no lo aguantaras. El error fue hacerte creer que yo era alguien a quien aguantar, alguien a quien cuidar, alguien inferior. Quería que fueras mi soporte, mi seguridad y en esos momentos te tambaleabas como un castillo de naipes. Salían a flote tus carencias, tus inseguridades. Y la culpa siempre era mia, no? Pues no. Trajiste a la relación una mochila cargada de sentimientos de culpa, de inseguridad, inmadurez que fuiste recopilando desde tu infancia y me la tiraste encima, creyendo, y haciéndome creer que era mia. Eras incapaz de pararte a mirar dentro de ti, porque te asustaba lo que veias. Era más fácil poner la responsabilidad en mi, en alguien que desde el principio se sentía responsable de todo.

Echo la vista atrás y pienso que ni siquiera fue bonito mientras duró. MI vida a tu lado estuvo llena de frustración, de dudas, de miedo, de discusiones, de irritabilidad. Sólo eras un parche para tapar mi vacio.

Quiero pedirte perdón por todos los malos momentos que te hice pasar, por mis enfados cuando incumplias las promesas, cuando tenías la casa echa una mierda o cuando te olvidabas de las cosas importantes. Perdona por haber depositado en ti la responsabilidad de cuidarme, cuando yo era incapaz de hacerlo por mi. Y sobre todo, perdoname por haberme metido en una relación que estaba condenada desde el principio sabiendo que así era.

Quiero darte las gracias por haberlo intentado. Por hacerme mejor persona. Ahora soy más flexible, tolerante, más paciente. Gracias por todas las risas, por todos los viajes, los abrazos, los "te quiero", los "lo siento", incluso los "que te den". Gracias por abrirme los ojos a mi verdadero yo, que no era ese del que te habías enamorado, sino ese que fui construyendo después. Gracias por haber tenido el valor de dejarme, porque yo era incapaz de hacerlo.

Te perdono la manera de entrar en mi vida, la manera de venderme la moto. Perdono tu cobardía, tu irresponsabilidad, tu suciedad, tu desorden, perdono todas las veces que me has dejado tirada, todos tus desplantes, tus bromas pesadas. Te perdono las mentiras, tus borracheras, tus gastos excesivos, tus abandonos, los mensajes sin contestar, las llamadas sin coger, los silencios, las huidas, tu histrionismo, tu inestabilidad, tus celos y tu manera de hacerme sentir culpable de todo.

Y sobre todo me perdono a mi. La manera en la que me metí en una relación por miedo a no encontrar a nadie que me quisiera de verdad. Me perdono todas las salidas de tono, mi mala hostia, mi intransigencia e intolerancia. Me perdono por pasarlo mal durante tanto tiempo, por no haberme querido, por haberme conformado con un amor a medias, por haber tirado del carro tantas veces, por haberme humillado ante ti, por haberte ofrecido un cheque en blanco para que pidieras lo que quisieras. Me perdono por haberte dado todo aquello que pedías y que nunca fue suficiente, me perdono por haberme culpado de no ser suficiente. Me perdono por haberte hecho cargar con mis carencias y por haberme hecho responsable de las tuyas. Me perdono por haberte querido, por haberte odiado y por estar tardando tanto en olvidarte del todo.

Te deseo amor y paz. Y que encuentres lo que buscas. Lo hemos hecho lo mejor que sabíamos.

Me despido de ti para siempre"

Pandereto

Si este ritual te ayuda a superar el fin de la relación, sólo puedo decirte ¡ANIMO!

usuario_borrado

Una muy bella carta de despedida. También hice una con la diferencia de que yo si la entregue.
De hecho, ese fue la razón de que encontré este foro buscando información para reconfortarme que hice lo correcto al enviarle una carta agradeciendo el tiempo que compartimos juntos.

Por supuesto, me aconsejaron no hacerlo en la que les comente que ya era demasiado tarde porque había sido leída por el destinatario.
Si te preguntas que lo respondió la respuesta es sí. Con el mismo sentimiento del Poder del Agradecimiento.

No es fácil agradecer que se vayan pero afortunadamente tome talleres de autoestima en que allí se te disciplina a Dejar ir.

Y sí, hay un gran abismo entre saber y hacer. Pero para eso tengo mi Diario de Agradecimientos en que día a día hago pequeñas anotaciones felicitando los pequeños placeres que me da la vida.

Zeus6

En tu carta resuelves, explicas y aclaras, lo que no quedan dudas en el aire ni detalles por resolver, Una vez todo esclarecido puedes cerrar esa puerta para siempre, sin sombras ni espectros, dejándola que se desvanezca por si misma en el tiempo, pero llevándote lo visto y aprendido en tu viaje por la vida, ahora sabrás decir: esto ya lo había visto antes ..

dadodebaja59479

Ojjj qué carta tan dura... creo que es tal vez exageradamente dura contigo misma, o debe ser que no estamos acostumbrados a toda esa sinceridad sin eufemismos.
Tiene que ser realmente catártico escribir algo así, describe todo un proceso sin idealizaciones tontas.
Es una mirada descarnada y sin miedos hacia uno mismo, y hacia una realidad sin lacitos rosas de ningún tipo. Introspección. Y sin piedad, sin autoengaño ni excusas, como debe ser.

Sé que no lo harás pero igual, de haberme dado a mí por escribir algo semejante no la enviaría al otro. Porque en trabajo mental que tú has hecho cada uno lo hace a su tiempo...cada uno a su manera, e independientemente de los errores y egoísmos de la otra persona leer algo así a destiempo no le aportará nada constructivo, sólo le parecerá una retahíla de reproches.
Cada uno tiene su camino y su ritmo, y lo que no aprendes a palos , lo aprenderás de viejo.
Que te sirva para renacer de ésas cenizas que quedarán después de quemarla.

Elizabetta

Percibo cierta rabia en ella?
Es posible que también rencor?

Creo que le restriegas mucho por la cara el hecho de que fue un parche para tapar el vacío que te dejó tu anterior ex.
Me imagino que has escrito otras cartas algo más amables, me equivoco?
Yo también escribía al pasar mis duelos, lo encontraba muy terapéutico.

Espero que encuentres paz después de esto, has aprendido que el duelo hay que pasarlo, es duro, pero no se debe utilizar a otra persona para aliviarlo.
Aparte de tu error de comenzar muy rápido otra relación, cometiste otro mayor al perdonarle tantas cosas como le llegaste a consentir.
Valorate, quierete y perdonate a ti misma.

jumma

Muchas gracias por tu respuesta. Para bien o para mal, tengo mucha facilidad de reflexiva y de introspección y quería mirar dentro de mi, sin paños calientes, sin miedo y ser sincera conmigo misma. Si no vale para aprender, que al menos valga para saber lo que hay, y con que cartas juego y puedo jugar a partir de ahora.

Ha sido un proceso duro, es cierto. No me sirven las palabras de "ella se lo pierde", "estoy mejor sin ella". Quiero saber porqué he llegado a ser carne de maltrato en el pasado y porque el "cuidado conmigo que soy horrible y me acabarás dejando" en el presente. Todo cambio empieza por mirarse a uno mismo, aunque duela. Mirarse, ver toda la oscuridad, y aun así, abrazarla.

Un abrazo

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jumma

El reproche es hacia mi, no hacia ella. Y no era mi intención demostrar ni rabia ni rencor hacia mi ex, porque ya no lo tengo.

Si que es cierto que estoy en proceso de perdonarme a mi misma, por todo lo que aguante y lo mal que se lo hice pasar por mis propias limitaciones.

Respecto a empezar una relación tan rápido... Yo no quería, la aleje todo lo posible, le pedí por favor que me dejara en paz pero me acosaba e idealizaba y termine dejándome querer. De ahí mi error al consentir algo que yo no quería) aunque nadie me puso una pistola en la cabeza, me resultaba muy difícil resistirme a eso). De hecho yo me he sentido utilizada. Es como un niño al que se le antoja una piruleta y hace lo posible por conseguirla caiga quien caiga. Y cuando se le pasa la ilusión, va a por otra piruleta.

Es una carta resultado de tres meses de reflexión diaria, (he escrito en este tiempo dos cuadernos enteros con todo lo que he reflexionado). Es verdad que puede sonar dura. Pero así es como he llegado a ver la realidad.

No he escrito cartas más amables, de hecho, cuando pasé la fase de rabia, lo que escribía en mi diario estaba lleno de ira hacia mi ex (me dejó por WhatsApp con un "no soporto el estrés emocional que me causas" sin derecho a réplica. Eso me llenó de culpabilidad y le mandé un correo pidiéndole perdón de forma pormenorizada por todo lo que consideraba que había hecho mal y dándole las gracias, también, de forma pormenorizada por haber sido capaz de querer a alguien tan desastre como yo. No obtuve respuesta.

Ahora ya no pienso todo eso que escribí justo tras la ruptura pero, en cierta manera, no me arrepiento de habérselo mandado. Creo que se quedó con buen sabor de boca.

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usuario_borrado

De hecho Almafuerte su escritura es muy sana. Este tipo de cartas fueron importantes en mi etapa depresiva que me ayudo a conseguir el Perdón. Y no me refiero a que otros me perdonen sino el de perdonarme a mi misma.
Toda la ira, decepciones y frustraciones plasmadas en papel es altamente recomendable. Es así como puedo escribir actualmente llena de gratitudes. Es por eso que comente en mi primer post que es una carta muy bella de despedida.

Tal vez de una sugerencia cursi pero recomiendo que se tenga el habito de tener un diario de la gratitud en que te llenas de buenas vibras al ver el mundo con otros ojos dejando de asomarse en el lado oscuro queriendo abrazarla para elegir bañarse en los rayos de la luz y embriagarse con intensidad en una clara perspectiva de la vida llena de sus bondades y altruismo.

No Registrado

Cuando la gente desconoce tus circunstancias, después de leer una carta así, puede opinar cualquier cosa y tener toda clase de impresiones.
A algunos tal franquesa reflexiva les parecerá demasiado dura.
Otros podrán tener la impresión que tus palabras están cargadas de enojo y rencor u otras cosas.
Me parece de lo más normal y razonable tener resentimientos y rencores cuando has sido lastimado especialmente durante una ruptura donde, además que has sido dejada, se trataba de una relación que por diversas razones era complicada.
Negar la concesión de tal enojo si que ahí me parecería poco razonable y mezquino porque nuestra capacidad sensible al odio es la que a su vez nos permite la del amor y el perdón.
En cualquier caso, en el proceso de recuperación solemos oscilar entre el rencor de lo que nos hicieron o dejaron de hacer y la culpa de lo que hicimos o nos falto hacer.
Es un vaiven que merece ser abordado por separado porque mezclarlo puede dar como resultado un ir y venir que genera la impresión de dar vueltas en un mismo sitio.
Me parece que en tu carta hay mucho crecimiento, asimilación y reflexión como resultado de un arduo trabajo de imventario interior por lo que cualquier componente emotivo en ella tiene más de liberador que de otras cosas que podrían engancharte o intentar mantener al otro de vuelta como desafortunadamente no es nada raro verlo.
Incluso «dar gracias» a veces puede tener algo de eso.
El genuino sentimiento interior y personal de gratitud es algo que viene después de las lecciones aprendidas y por si solo conforme afloras una vez que amanece para ti después de una larga noche en tu vida.

Algunas frases en tu carta contienen mucha sintesis como resultado de sopesar los contrastes de las respectivas co-responsabilidades que tienen lugar en toda relación así entonces es interesante el balance entre razón y emoción porque reconoces tu responsabilidad en el apoderamiento de ella sobre unas condiciones y circunstancias propicias que así lo favorecían donde cada cual jugó su respectivo rol acorde con las capacidades y recursos de cada una en ese momento hasta llegar al limite donde las posibles ganancias dejaron de ser suficientes como para compensar el alto precio emocional a pagar.

Si bien es cierto que las frases de consuelo del tipo "ella se lo pierde" o "estás mejor sin ella" no suponen mayor esfuerzo de crecimiento y madurez que la de un ego otra vez lo bastante inflado para librar las espinas más inmediatas al final queda tan proclive a reincidir y caer desde la misma altura apenas con el menor pinchazo, así también habrá que reconocer en ese enriquecimiento introspectivo que lo humano de las relaciones y el amor, tan dados a los rituales, no hay conjuro suficiente que nos salve y nos libren del dolor y la gracia de estár vivos con tanto por venir.
Hoy sigues siendo la misma y distinta a la vez y quizá ella, sin pretenderlo, contribuyo a la «psiquiatrización» que tenías pendiente desde antes.
Una vez que revaloras tu valía personal ya no la pones en entredicho por alguien que solo pudiste elegir y aceptar estár con ella en una etapa de total menosvalía hasta que algo como un simple mensaje de WhatsApp le bastaría para separarlas.
Limar el apego y superar una ruptura es un gran paso pero lo es todavía más si, aparte de todo eso, encima examinas y asumes la responsabilidad emocional que justo alguna vez, como ahora ya bien sabes, depositaste en ella u otros.

jumma

Creo que no lo podría haber descrito mejor.

Una de las cosas que más me esta ayudando es permitirme sentir todo lo que describes sin ponerle trabas. Haber sentido la rabia, la ira, la culpa, la pena, la angustia sabiendo que era lo que tenía que pasar.


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dadodebaja56523

Me parece una buena catarsis el hacer una carta para canalizar un duelo. Tu narracion fue bastante cruda y sincera. Algo que a mi me ha resultado en un duelo con una ex, fue casi similar a lo tuyo, escribir una carta pero no se le entregue sino que opte por quemarla. Es una buena forma de quitarse psicologicamente las penas.

Elizabetta

Yo recuerdo, cuando terminó mi segunda relación y yo le seguía amando con locura, que le escribí cartas interminables, de 6 o 7 folios por ambas caras, a veces eran ilegibles, ya que las escribía llorando y mis lagrimas borraban la tinta del bolígrafo.

Tuve la tentación, no obstante, de enviar alguna, él si me mandó varias y se que su dolor era equiparable al mio, pero existían razones que en aquel caso fueron más fuertes que nuestro amor, al final no envié ninguna.

Mi segundo amor, era un hombre maravilloso, único, y jamás perdí la esperanza de retomar lo nuestro, él se marchó muy lejos, y aún así me hacia llegar algún mensaje suyo por medio de otras personas o llamándome por teléfono.
Solo la muerte le arrancó de mi vida, cuando me enteré de que había fallecido, lloré horas y comprendí que definitivamente se había ido.