Si cuentas todas estas fatalidades de tu inminente ex-novia es porque has consentido demasiado. No comprendo por qué has aguantado tanto porque, total, esto iba a reventar igual, antes o después.
Al mínimo indicio de control, manipulación o celos desmedidos, hay que cortar la relación rapidito. Rapidito y, muy probablemente, para siempre.
Y si te contaron una vez la milonga de que el amor se gana y que las personas cambian, ya sabes lo que fue: una milonga.
Está muy bien el velo de romance con el que engalanas esos preciosos momentos iniciales, tristes miradas, atardeceres anaranjados, etc. pero las decisiones drásticas como arrearles un buen portazo en los morros a indeseables y advenedizos, también pueden ser muy románticas, en la medida en que ganarás un tiempo precioso para conocer e intimar con personas más decentes que te llenen más. Si es por ella, en fin, que se ponga a vestir santos desde ahora mismo.
Bastante tenemos con nuestras propias vidas para tener que aguantar neuras de personas que nos encontramos por ahí. Las miradas tristes son solo 'fotografías' en el tiempo. Lo que importa es el presente y el bienestar.
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