Echarte de menos a veces me ahoga. Me parte. Me mata.
El seguir pensando que todavía estás aquí, conmigo, cuidándome como siempre tú lo hacías.
Estar queriendo a escondidas, para que no me veas aun sabiendo que no puedes verme. Estar amando sin querer. Sin querer quererle, por si te enfadas, por si vuelves, aun sabiendo que no puedes volver.
Torturándome con tu imagen de vez en cuando para sentirte cerca.
Estar sonriendo por él con verguenza, por sentir que te engaño, aun sabiendo que a ti no puedo engañarte.
Seguirte esperando, aun sabiendo que te has ido, aun sabiendo que no estás.
Seguirte esperando, aun sabiendo que los vacíos como tú no vuelven, aun sabiendo que los vacíos como tú, se van.
|