Llevo bastantes años con una chica en una relación tranquila, sólida y aparentemente con buena salud, hasta hace unos días.
El sexo siempre ha sido secundario. Para ella nunca ha sido una prioridad y es algo que he respetado.
Hace tres meses ella comenzó a relacionarse en nuevos círculos. Dedicaba más tiempo a sus nuevas aficiones. Más tiempo para cafés, cañas, salidas nocturnas hasta altas horas, instagram, móvil e incluso comenzó a beber y fumar (hasta entonces nunca lo había hecho).
Como consecuencia, el tiempo en pareja se redujo a la mitad y el sexo casi desapareció. Hasta su madre me comentó la cantidad de horas de ocio que tenía su hija últimamente.
Le hice saber que me preocupaba, pero ella decía que no entendía cómo me "enfadaba" porque saliera con amigas. De nuevo decidí respetarla y darle su espacio.
Y de pronto un día, sin venir a cuento, me dice que no estamos bien con un nerviosismo impropio de ella. Me echa en cara que no dedico tiempo a la relación por mi trabajo (cuando llevo en el mismo trabajo desde que empezamos) y que no entiende cómo puedo enfadarme por sus nuevas aficiones. Y me dice que a ver qué hacemos.
Mi cara era un poema. ¿Te doy espacio y me lo pagas así?
Le pregunto si me sigue queriendo y me dice que muchísimo. Le pregunto si cree que puede solucionarse y responde que no sabe.
Desde entonces 72 horas de silencio absoluto (buenos días y buenas noches, nada más) salvo una vez al día que pregunto si quiere hablar y responde que no tiene nada que decir.
Me siento estafado. Por su comportamiento sé que quiere dejarlo, que no tiene la más mínima intención de arreglarlo, pero no quiere dar el paso (además quiere quedarse en el piso) y trata de forzar para que sea yo.
Para colmo creo que no me dice toda la verdad. Le he dicho que sea valiente y honesta, que no se engañe a sí misma, pero dice que no tiene nada que decir.
Después de respetarla al 1000% y de quererla más de lo que nadie hará, me siento defraudado y engañado. Siento que no es la misma persona con la que empecé a salir.
Pero me niego a complacerla en el último acto de la relación.
¿Dejará pasar semanas o meses para vender que lo hemos dejado porque el ambiente era tóxico e insoportable? Eso mismo hizo su mejor amiga con el ex, pero el motivo de la ruptura era otro.
Me planteo hacer de tripas corazón. Mostrarme cariñoso y cercano. Proponer planes. Abrazarla en casa de sus padres. Trolearla, en definitiva, para que no tenga otro remedio que dejarme con motivo e irse de casa.
Sé que es vengativo, pues mi confianza en ella casi ha desaparecido y doy la relación por perdida al 90%, pero no quiero volver a rebajarme a la altura del betún. Y mucho menos irme de casa.
¿Qué opináis?
Un saludo y perdón por el tocho.
Modo Hilado