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Hace unos días fue el cumpleaños de mi enamorado. Desde que nos conocimos fuimos muy unidos pero al mismo tiempo no nos queríamos dar cuenta de la atracción que sentíamos el uno por el otro, especialmente por que su mejor amigo estaba enamorado de mi y se me había confesando.
El asunto fue que se me declaró y era tan buena gente que me dolió decirle que no, así que me la aguante y le dije que lo pensaría. Ahí entraría mi enamorado, con el objetivo de convencerme de salir con él. Y...,no sé, no sé qué pasó ni cómo pero desarrollamos una conexión que los dos sabíamos que estaba entre comillas mal por su amigo, pero a la final le dije que la única verdad que era que por su amigo no sentía nada... Ahí es cuando mandó todo al demonio y me pidió estar.
Y llegamos a la actualidad. Cuando lo llamé por su cumpleaños, estaba muy feliz por él, como si incluso fuera mi cumpleaños y no el suyo, pero todo se apagó cuando me contestó fríamente. Sus amigos estaban ahí, jugando play en su casa, ya que se oía de sobra los gritos de chicos renegando por FIFA, así que al parecer se fue un lado y me contestó. Como siempre, le pregunté como iba, ya que antes le dije que la pasara con sus amigos y ya otro día saldríamos los dos, pero el se limitó a contestar un "Todo esta bien ¿algo más?". Me quedé helada, por más que intentaba apasiguar su tono no lo lograba; deprimida, colgué después de decirle un te quiero que él no contestó.
Cuando organizó una fiesta por su cumpleaños al día siguiente, le dije que yo también quería ir ya que ese día le tenia libre en la universidad. El me negó eso diciendo que estaría su mejor amigo y no quería conflictos, yo solo pude responder que con el chico estaba en buenos términos y de ser necesario no le dirigiría la palabra, pero el insistió. Una semana después, me dijo que era mejor darnos un tiempo, que su mejor amigo había dicho que si estaba conmigo (al parecer no le había contado de los meses que había pasado conmigo) dejaría de hablarle. Me sentí mal, pero le acepté pensando que iba a arreglar la cosa.
Preocupada, le escribí a su mejor amigo preguntando por qué lo condicionada así. Y adivinen, nunca le dijo eso. Me dijo que al contrario, le había dicho que si era feliz conmigo, el estaría bien. En conclusión: me mintió.
Ahora, otra semana después, me ha dicho para regresar y que ya lo había convencido, me hicea que no sabía y acepté. No sé ni cómo enfrentarlo o si ya de una vez debería cortarle, especialmente cuando al parecer para uno de sus amigos "nunca formalizamos nada'".
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