A priori no es difícil de diferenciar a una persona justa de la que no lo es, esta claro que no se trata mas que ser equitativo, imparcial y dar a cada uno lo que legítimamente le corresponde, resumiendo nada distinto a lo que sería aplicar el sentido común.
Otra cosa sería la justicia que, aunque lo ideal sería igualmente la aplicación del sentido común, no siempre es así, en este caso se trataría de ceñirse a la Ley y no podríamos tildar de injusta alguna sentencia por muy rara que nos pareciese, si esta tipificada en el código penal, porque cualquier magistrado que no aplicase la Ley estaría incurriendo en prevaricación.
Lo cierto es que progresivamente la legislación se va adaptando al sentir popular y evoluciona con los tiempos, no hace falta ir muy atrás para comprobar que la homosexualidad, el amancebamiento, el abandono de hogar....por poner algún ejemplo, eran delitos y por lo tanto punibles con sentencias condenatorias y, aunque hoy en día impensable, nos gustase o no se estaba aplicando JUSTICIA porque estaban recogidos como Ley en el código penal y ya no hablemos de otros países donde la legislación tiene claras influencias religiosas fundamentalistas donde se puede lapidar a una mujer y, aunque adberrante, también es justicia.
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