Yo creo que llega un punto (a algunos les llegará con 25, 30 o 40), en el que vemos que efectivamente el mundo no gira en torno nuestro. Que estamos de paso. Todas esas cosas quizás se sepan desde mucho antes, pero no se nos hacen reales porque como individuos solemos pensar que con nosotros será diferente, que marcaremos un hito, una diferencia. Y cuando chocamos con la realidad, o te da por embajonarte o empiezas a cuestionarte todo para encontrar un nuevo estímulo o valor en tu vida.
A mi me ha pasado, aunque fue hace años ya (es ahora cuando tengo 29). Me di cuenta que algunas cosas, tanto de mi vida como del mundo en general, no me gustaban. No era lo que yo pensaba que sería mi futuro. Hay cosas que no puedo cambiar, y otras que sí. Bueno, en parte es interesante poder hacer introspección, siempre que no te obsesiones con ello.
|