Mirad que cosa más curiosa le sucedió a una amiga:
Ella siempre se quejaba de que ningún tío que mereciese la pena se había fijado en ella, que le costaba socializar y que estaba hasta la pepitilla de verse los findes sola. Yo, como soy un amigo que T-K-gas, le dije que cambiase de look, que fuese más atrevida, que mostrase su disposición a conocer chicos más abiertamente.
No sé qué se le cruzó por la mente que mi amiga puso en su avatar del messenger una foto suya sacando una teta y aquello fue como si hubiese sonado la campana de a comer en un cuartel. Todos los tíos querían conocerla a fondo y quedar con ella y en feisbuc también.