Cada persona es un mundo y, por tanto, difícil dar con respuestas generales que valgan para todos los casos. Ese comportamiento puede obedecer a varias razones: querer hacerse la interesante, ponerte celoso, incitar aún más tu deseo, ganas de coquetear, un temperamento frívolo sin más... O quizá tan simple como que en el fondo no le gustes tanto como tú piensas
|