El problema no es que exista o no la suerte. El problema es pensar que todo el que ha conseguido algo ha sido por suerte, y que las cosas sólo se logran por suerte.
Tengo un amigo que era tan tímido que nunca se hubiera echado novia y nunca se hubiera casado. Sin embargo tuvo la suerte de que la vecina, la que le gustaba, de miraditas, se le acercó un día y se le declaró. Y se casaron. Ya ves, sin esforzarse.
Claro que esto se puede ver de otro modo. La chica decidió que tenía que armarse da valor porque de otro modo no pasaría nada. Para ella el mismo hecho no fue una cuestión de suerte, sino puro esfuerzo suyo.
En esta misma pareja, él tuvo mucha suerte de enamorarse de una chica que decidió hacerse cargo de su propio destino y ella tuvo la mala suerte de enamorarse de un tímido patológico.
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