Queridos amiguitos:
Últimamente he ido sabiendo de algunos de vosotros que andáis de tonteo y tanteo con muchachas, cosa que es buena y natural, lo malo y antinatural es estarse en plan vegetal pasando el tiempo sin hacer nada al respecto de la soledad, no tener vida social ni interés en tenerla.
Pero al tiempo parece que hay comportamientos que por más que leemos el forete parece que no terminamos de asimilar y luego cuando entramos en acción la pifiamos. Me refiero a que hacemos el Personaje Disney.
En las películas de Disney el personaje o la personaje se hacen los interesantes con el personaje o la personaje que al final de la película se convierte en su pareja y en las pelis Disney es una constante que ese comportamiento se observa sin discriminación de especies, que lo mismo lo hace el pitufo ramplón con la pitufa que lo hace el ciervo cornúpeta con la cierva descornada.
Muchas veces nos vemos en la tentación, cuando creemos que estamos inmersos en algo con perspectivas de futuro, ya sea a corto o medio y largo plazo, de tentas y poner a prueba a esa persona "especial"; hacemos cosas como tratar de tocarle las narices respondiendo tarde a sus mensajes en el medio electrónico de turno, ignorarla en local de copas a ver si nos busca y de repente espaciar y dejar de hablarla a ver si nos sigue buscando y se mosquea. Eso es hacer el Personaje Disney y, salvo que seáis guapos como Adonis, es la manera más rápida y segura de acabar en el cubo de los desechos de la chica en cuestión.
Ellas no funcionan como nosotros, ellas no tienen necesidad ni de echarnos de menos, de hecho, no nos echan de menos, si desaparecemos, desaparecidos quedamos. Y no importa, hay por lo menos dos o tres más esperando en su puerta a ser recibidos, con lo que cada oportunidad no aprovechada no queda para más tarde, simplemente se desperdicia con consecuencias impredecibles.
Si andáis de tonteo con una y más o menos véis que entra por el aro, no os quedéis esperando a que ella mueva ficha, simplemente no lo hará. Ella tiene candidatos, más de los que os imáginais y algunos incluso de lejos, tíos que aparecen por la Red de redes y que se cuelan en sus Whatsapp, skypes y demás.
No os confiéis ni perdáis el tiempo, el espacio que dejáis libre lo ocupará otro sin tardanza. Si al terminar la conversación típica deantes de dormir la cosa queda en tierra de nadie, tirad otra última piedra a su tejado antes de desconectar hasta el día siguiente, y por la mañana, sed el primero en tirar otra piedra. No os hagáis los duros que eso no sirve de nada.
No hace falta que me agradezcáis el consejo, aunque si queréis podéis ingresar una módica cantidad en una cuenta que tengo en un cierto lugar montañoso cuyo nombre empieza por And y a acaba en orra
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