Perdido en el ruido sordo de la realidad

Caballerosolitario

Despierto, me siento en la cama, miro al piso
Sin saber si ponerme de pie, si volver a intentarlo.
Finalmente algún misterioso viento que pasa por mi
Alma me eleva a mis pies; y ando.
La mañana y el despertar traen consigo la realidad
Que me pertenece y me la entregan para
Que cuide de ella durante el día
Hasta que nuevamente la vengan a buscar.
A veces esta realidad se quiere quedar conmigo
Y yo con ella, porque me gusta en este momento
Porque yo le gusto y los dos nos gustamos
Pero hay momentos en los que ella se enfada
Entonces no la quiero cerca, realidad caprichosa
E infantil que no sabe lo quiere, que no siente o compadece.
La vida sobria gira, me lleva al cielo por apenas
Segundos y cuando pienso que lo
He tocado no me he dado cuenta y estoy cayendo
Hasta tocar lo rocoso y duro de la tierra…
A veces no se que esperar, el miedo al dolor
Lo hace todo una agonizante espera.
Que será de ella?
Le gustare? que piensa? como no tener el don divino
De adivinar sus pensamientos a través de sus brillantes ojos.

No doy paso a las ilusiones que intentan materializarse
Pero el ambiente es muy propicio, y las
Infames y deseosas peleadoras al final vencen
Y crecen como las flores que se contentan cuando su amiga
La lluvia les viene a visitar.
Mi espíritu hambriento de ternura
no puede evitar la tentación de arrodillarse
para rogar por algunas migajas de su sonrisa
como si se tratase de un sediento caminante a través de un desierto
y una gota de agua despertara una gota de placer.
Cuan pequeña esa gota. De sed y desesperación
muere nuestro amigo.
Esperanza, fe, y la fuerza de los pensamientos lindos
Y frondosos… fantasias? Si, poesía, es lo único y todo lo que queda.