Buenas noches a todos
Hace unos meses empecé una relación con un chico que podría considerarse " a distancia", no tanto por los km entre ambos sino porque yo no tengo tiempo entre semana, (porque trabajo muchas horas) y físicamente sólo nos vemos los sábados y domingos.
Nos conocimos por internet y conectamos enseguida. El problema es que yo me emocioné y quería verle todo lo posible (dentro de mi horario), y él me pidió tiempo para salir con sus amigos también algunas semanas. Me pareció razonable y además, no quise presionarle, no se sintiera demasiado agobiado y falto de libertad. Así creí que nos adaptaríamos el uno al otro.
Me pidió que viviera el presente, y a mí eso siempre me ha olido a chamusquina. "Que no echara las campanas al vuelo" o hiciera planes. Que el tiempo diría.
Como la mayoría, quería ir rápido en lo físico y muy muy despacito en lo demás. Soy humana, pero tampoco fácil, aunque al cabo de algunos meses le permití ciertas libertades. Se revolvió un poco cuando le pedí ponerle nombre a lo nuestro, pero transigió.
He conocido a sus padres, pero... no quiere presentarme aún a sus amigos, y de hecho, me pide que no nos agarremos cuando pasamos por ciertos lugares. Intento ser adulta y entenderlo, pero... cuesta.
Soy una chica con trabajo, medianamente mona, con estudios y buena educación (no es lo mismo, no) ¡No el monstruo del sótano!
A pesar de las "libertades" de las que hablo, dice no poder tener sexo conmigo, porque le trae recuerdos dolorosos de su ex... que espere hasta que esté preparado para compartir eso conmigo.
Yo... hace tiempo que lo estoy. Tengo sentimientos por él, pero no quiero ser la primera que lo diga. Demostrar que estoy demasiado interesada. Asustarl.
Hoy además se ha referido a mí como "amiga encantadora".
¿Preparo las zapatillas para salir corriendo ya? ¿Lo doy por perdido? ¿Lucho y le apoyo?
Es un buen tío, con un fondo estupendo, pero he sufrido ya demasiado daño como para permitirme otro desamor.
|