Bueno, en mi caso lo dejé yo. Me prometí a mi mismo no volver a verla, ya que en el último tramo de nuestra conviviencia nos hicimos daño. Todo en calma hasta que a ella le dio la manía de querer volver (quizás se dio cuenta de lo que perdió después de "ver" otras opciones) y no paraba de llamarme con cualquier ínfula excusa. Un día a finales de abril accedí a verla pues la verdad quería saber cómo andaban sus niños (a los que crié como padrastro desde los 6 y 7 añitos, respectivamente). Fue tal lo que me encontré que me juré a mi mismo no volver a saber más nada de ésta mujer. Y como no quiero dar detalles, ahí lo dejamos. Ya no volví a saber más nada, cuando en una llamada le dije tajantemente que me dejara en paz. De lo cual me alegro profundamente. De haber accedido seguiría en profunda ruina moral, afectiva y económica. Ahora el mundo vuelve a ser azul, como Dios manda. Y se lo debo a mi afán de superación, en primer lugar y en segundo a una personita en especial, a la que amo profundamente. Gracias.
¿Os dais cuenta ahora para lo que sirven los/las ex?
|