Bueno, ahora me toca a mi contar mi problema u.u!. De antemano gracias si se dan el tiempo de leer, creo que escribo mucho...demasiado diría yo, pero es necesario
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Hace ya unos 6 meses que empecé a hablar más seguido con una amiga de la universidad. Estamos en el mismo curso, nos vemos todos los días prácticamente, y con el tiempo hemos desarrollado una confianza enorme. En un principio, me hablaba básicamente para pedirme consejos sobre una relación que tenía ella con alguien de otra región. La relación si bien llevaba sus buenos 2-3 años, iba de mal en peor, y siempre acudía a mí para poder consolarla, aconsejarla,etc. Finalmente la relación se acabó, y terminó en mala onda. Ya en ese entonces si bien la encontraba bastante bonita a mi amiga, no me llamaba mucho la atención. En el último tiempo me había puesto excesivamente duro y frío respecto al tema del amor, y no pretendía quedar mal de nuevo (curiosamente en eso estoy ahora).
Al final, después de tanto conversar, sentir y pensar al respecto, mi amiga me terminó gustando, y mucho. Yo...tenía clara la situación, ella venía terminando hace poco de una relación larga, pero que al parecer no fue del todo buena. Claramente eso me hizo pensar que mi amiga era poco probable que quisiera estar con alguien en ese momento, cuando lo más adecuado quizás es que este sola, que se divierta, que conozca más gente, que tenga algo pasajero con algún tipo, etc. Estaba y sigo consciente de eso. Además, un dato, ella había estado ya en pareja unas 7 u 8 veces. Es de esperar que en este momento de su vida pretenda "liberarse" un poco.
Seguimos conversando de lo más bien, y de hecho fuimos haciendonos más cercanos todavía. Yo me había prometido a mi mismo que haría todo lo posible para que ella estuviese feliz; una sonrisa de ella para mi es un obsequio invaluable. La ayudaba en lo que pudiese, la hacía reir, la retaba si era necesario. Lo único que quería es que pudiera rendir bien en su día a día (A raíz del término de relación, vivir sola, tener parientes en otra región, y porque siempre ha sido un poquito perezosa, en la universidad no le empezó a ir muy bien). Me preocupo mucho por ella, y me da...miedo quizás verla caer, o que siga en actitudes poco favorables para su salud, estudios y vida en general.
Con el paso de los meses, obviamente intenté compartir más tiempo con ella. No resulto del todo bien, ya que las veces que pretendiamos hacer algo (por iniciativa de ella o mía), en muchas ocasiones no se realizaba nada porque había una excusa--cierta o no--de por medio. A ratos pensé que era de paranoico, pero seamos sinceros, uno igual en el tono y en la forma en que se dicen las cosas, sabe si la persona miente. Puede que no sea intencional, es algo despistada y además ella misma decía que su tiempo lo quería dedicar a sus amigas más cercanas. En fín, nos juntamos un par de ocasiones, solo para compartir o en otras ocasiones para hacer trabajos de la universidad.
El caso es que entre conversación y conversación, ella me contaba de las salidas que tenía de repente, de como lo había pasado con X tipo, si se habían besado,etc. Podrán imaginarse lo...mierda...que uno se siente al estar aconsejando o escuchando eso mientras esa persona te gusta. Como decía antes, lo tenía super asumido que es parte del proceso que tiene que vivir, pero cuesta, y duele...mucho.
Justo en esa conversación, después de haber escuchado un montón de cosas por las cuales me querría cortar las venas u.u!, me pregunta si a mi me gusta alguien. Me pilló de sorpresa, y bueno, ya hace bastante tiempo me había dejado guardada la respuesta, asi que le dije. No supo que responderme, al parecer ella no se lo esperaba, aunque durante todo este tiempo le tiré muchas señales. Una amiga me decía que quizás sabía, pero que estaba esperando que se lo dijera. Finalmente quedamos en nada, no nos dijimos nada definitorio, pero sabiamos los dos, que ahora mismo tener algo sería poco probable. Ella tiene que estar en otro mundo ahora, tiene que divertirse. Solo me dijo que ya no podría quizás contarme toda las cosas que le sucedieran o hiciera por razones obvias. Y además, que yo en todo este tiempo me había convertido en uno de sus mejores amigos (frase lapidaria se supone). Después de eso, me pidió que me quedara, y nos pusimos a ver una película. Estuvimos abrazados en todo momento en la cama, nos acomodabamos, había cariño, juego de manos,etc. Lo curioso es que desde ese momento, si bien en otras ocasiones ya había recibido algún tipo de señal por parte de ella, es de esperar que si alguien no esta interesado en ti, se aleje. Esto último no sucedió, de hecho fue todo lo contrario. El acercamiento a ella ha sido mayor, me llama sin motivo aparente, sigue siendo igual de cariñosa, e incluso más, especialmente en lo que a contacto más físico se refiere. Todo eso me confunde, porque finalmente del supuesto alejamiento que se debería producir, cada vez nos van uniendo más cosas, y que además a futuro nos servirá como pretexto para entablar otra conversación; objetos personales prestados, etc. Ella me desafía, me incita a que haga cosas. Una vez parecíamos como niños jugando, yo la cargaba en la espalda, me hacía cosquillas, nos caíamos, nos reiamos. Hemos tenido unos abrazos de despedida sumamente largos en plena calle. La forma en su actuar, en su mirada, en los juegos de manos, me hace pensar que de verdad puede haber algo. Además, intercambiamos un objeto super simbólico para ambos; mi pulsera budista y ella una cinta que tenía amarrada. Han pasado tantas cosas, nos hemos juntado mucho, si hasta conoció a mis padres, y los amó.
Ahora, todo bien, pero creo que aún debo armarme de paciencia. Ella aún esta en el proceso de querer jugar creo yo. Además, ella me contó que en julio volvía de otro país un amigo que cuando ella estaba en su otra relación, le interesaba, y que estaba la posibilidad que estuviese con él. De hecho, ese mismo tipo le dijo que cuando volviera, inmediatamente deja a su novia y se mete con mi amiga.
Con o sin ella, tarde o temprano tendré que vivir ese episodio. El tipo que vuelve será un gran reto para la relación que tengo con ella. Si ya se me hace un martirio el pensar que puede tener aventuras con otros tipos, ni pensar con este otro que llega para quedarse, y más encima, como sin importarle, termina con su otra pareja e inmediatamente se metería con mi amiga...que bien.
A pesar de todo, creanme que como nunca antes me tengo confianza. Se que de todo esto saldrá algo muy bueno. Quizás no sea hoy, pero sí mañana, pero creo debo seguir intentando. Debo fortalecerme internamente, y aceptar que ella también debe vivir sus procesos tranquilamente, con o sin mi ayuda. Yo igual la esperaré, y cuando necesite de mi ayuda, ahi estaré.
Gracias por darse el tiempo de leer.
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