Cierto, pero, aunque yo soy maestro, no voy pidiendo a gritos una maestra. Simplemente, aunque no tenga estudios, que sepa expresarse y tenga un mínimo de educación. O sea, no rechazo a ninguna chica por no tener estudios, las rechazo por ser chonis o poligoneras, esas que de cinco palabras que sueltan, cuatro son tacos, y su voz es más semejante a la de un camionero que a la de una mujer
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