Pues sí, un imbécil sin paliativos.
Ya estuvo mal que ni se fijara en si te habías hecho daño con su mala conducción, pero que te contestara así después de escuchar de tus propios labios que le habías hecho daño.
Vamos hombre, que se quede sólo con su moto y que se de placer con su tubo de escape.