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Bueno chicos, os voy a contar mi historia, y espero que podáis ayudarme...
Hace dos días mi novio, llamémosle Bruno, me dejó. Este mes hubiéramos cumplido 4 años y medio.
Nos conocimos en nuestro pueblo de veraneo en Galicia, y nos gustamos y enamoramos desde el principio, sin embargo había un inconveniente: el vivía en Madrid y yo de aquellas aun en Galicia. Aun así iniciamos una relación y estuvimos un año a distancia, hasta que yo me mudé a Madrid para estudiar y para estar con él.
Nuestra relación no siempre fue bonita, como todas las demás pasamos por baches, por momentos de no saber si debíamos seguir o no, pero finalmente acabamos superándolo todo.
Sin embargo, lo peor llegó justo hace un mes, cuando él empezaba exámenes.
Tengo que mencionar que este año se cambió de carrera y de universidad, dado que la anterior carrera no le fue para nada bien, suspendía muchísimo. Esta vez sin embargo, todo en cuanto a exámenes le salió bien.
Todo empezó cuando le vi raro, y tal vez mi problema fue que en vez de dejarle su espacio y dejarle respirar le estuve muy encima, queriendo saber de él y el que le pasaba. En un principio me dijo que lo que le pasaba era que creía que me echaba mucho de menos, a los pocos días discutimos porque lo que decía que le pasaba era que lo que realmente creía era que no sabía si quería seguir en la relación. Quedé con él, hablamos determinadamente, decidimos empezar de cero, pero ahí se quedo la cosa.
Yo le veía más distante que nunca, apliqué el contacto 0, tras tres días me llamó desesperadamente porque estaba inquieto, no conseguía dormir y quería escuchar mi voz. De ahí volvió a desaparecer. Y ahí fue cuando a los pocos días de llamé, diciéndole que se estaba portando fatal conmigo, que yo no me merecía ser tratada así, que no le veía dispuesto a rescatar nuestra relación y que necesitaba que hablásemos muy seriamente, y que hasta ese día no quería saber nada de él.
De hecho así fue, no volvimos a hablar hasta hace dos días, y ahí tuvimos la conversación más sincera de toda nuestra relación:
Al principio la discusión fue bastante fuerte la verdad, le eché cuando me dijo que no quería seguir, luego le pedí que se quedara, y luego la segunda vez que intentó irse se iba sin más, sin despedirse, ni darme un beso en la frente ni un mísero abrazo, y ahí fue cuando le tiré un cojín a la cabeza, gritándole que no era normal que se fuese así, sin ni siquiera despedirse ni nada, gritándole que no le importaba una mierda sino en todo este tiempo me hubiera escrito para saber si estaba bien, que sabía perfectamente que lo estaba pasando fatal, y vino corriendo, pidiéndome perdón, diciendo que se iba así porque no estaba seguro de lo que yo realmente quería, si era buena idea darme un abrazo y siquiera un beso, y ahí fue cuando realmente empezó nuestra conversación de verdad.
Le dije que me echaría de menos, que a quién iba a llamar él ahora para contarle anécdotas de la universidad, y quién le iba a decir las cosas tal y como las pensaba, porque sabía perfectamente que yo era la única persona en su vida que haría eso, ni siquiera sus nuevos amigos de la universidad iban a hacer eso, y por muy bien que se veía en estos momentos con ellos ese sentimiento no duraría para siempre.
(Tengo que destacar que Bruno nunca tuvo realmente amigos en el colegio, de hecho fue maltratado por aquellos que creía que eran sus amigos, y en su anterior universidad tampoco llegó a hacer realmente conexiones, en comparación con ahora. Fue al psicólogo durante un tiempo, tiempo en el que las cosas le fueron bien, pero como todo, lo dejó al pensar que ya no lo necesitaba, cuando no era así. Eso mismo le dije también en nuestra conversación y le hice prometerme que siguiere con el psicólogo, pase lo que pase.)
Y seguimos hablando, sincerándonos muchísimo. Le dije que le quería y él me dijo que él a mi también, pero que no lo suficiente como querer seguir en esta relación, que seguía enamorado de mi, pero solo un poquito, que ya no tenía esa necesidad de llamarme a todas horas cuando le sucedían cosas buenas o malas.
Le dije que después de esta conversación podríamos intentarlo, desde cero, sinceros, y que podríamos ser felices, que lo estábamos teniendo todo para ello Y os juro que nos sentimos muy cómodos en todo momento, nos sentimos muy bien. Pero su respuesta fue que no, que él ahora mismo no podía, que necesitaba verse a si mismo fuera de esta relación, necesitaba crecer por cuenta propia. Me dijo que no viese esto como un "hasta siempre" sino como un inciso en nuestra relación, y necesito que me ayudéis a interpretar esto, porque me está volviendo loca. Que esto nos ayudaría a darnos cuenta de lo que realmente queremos, que si realmente estar juntos es lo que queremos.
En uno de nuestro abrazos, que sin exagerar duró unos 10 min, le dije "Te quiero un montong cosota", que es la forma cariñosa y mimosa que siempre hemos tenido para mostrarnos nuestro amor, y decirnos que nos queremos. En ese momento me abrazó con mucha más fuerza, y con una voz temblorosa me dijo que me necesitaba, que necesitaba que siguiera en su vida, que podríamos intentar ser amigos, y yo le contesté que no, que no podía seguir en su vida de la manera que él me lo pedía, que o me tenía entera o no me tenía en absoluto.
Le propuse estar sin comunicación durante un mes y luego volver a hablar y ver las cosas de otra manera, pero me dijo que no, que él no es partidario de los "tiempos" y que tampoco quería estar un mes completo sin saber nada de mi, y le dije que era lo que iba a tener, porque yo no tenía pensado ponerme en contacto con él.
Le dije que lo que nos había pasado es que realmente estábamos viviendo una relación de adolescentes, y que con la conversación que acabábamos de tener podríamos tener una relación mucho más madura y fuerte, pero me dijo que lo sabía, pero que recalcaba que ahora mismo necesitaba verse fuera de la relación.
Le dije que tendría que haberlo hablado conmigo en su momento, que hubiéramos podido solucionarlo en su momento, y me dijo que lo intento, que intentó darle varias oportunidades y que no sirvió, que no quiere seguir así, que ante todo necesita ser sincero consigo mismo, que necesita estar bien consigo para poder estar bien conmigo.
Y así se quedó conmigo, tumbados y abrazados en mi cama durante 4 horas, en los que reímos, hicimos bromas y recordamos buenos momentos. Me dijo que no se arrepentía de nada, ni de lo malo ni de lo bueno. Que no se iba porque no quería dejarme sola, pero al cabo de un rato me confesó que realmente no se iba porque sabía que al salir de la puerta todo se había acabado.
Y después cuando nos despedimos en el portal se quedó ahí, conmigo, estuvimos despidiéndonos durante 10 min entre abrazos y besos, él ya tenía los ojos llorosos, y sé que cuando se fue estuvo durante 15min llorando en su coche antes de marcharse, porque lo tenía aparcado debajo de casa y le estuve espiando.
Se que Bruno no hizo las cosas bien, y creo que en el fondo lo que también le pasa es que cree que no me merezco a una persona como él, que me merezco algo mejor porque yo se lo he recalcado varias veces.
También se que yo tengo mi parte de la culpa de todo esto, porque desde hace dos meses llevaba distante con él, pensando en si esto era algo que yo realmente quería, si no había otra cosa mejor esperándome por ahí fuera, y por si fuera poco estuve el último año con anticonceptivos que me bajaron el libido y que hicieron que el sexo no fuese el mejor, pero lo dejé y todo estaba volviendo a la normalidad.
Necesito que me ayudéis, quiero recuperarle, volver a enamorarle y que esté loco por mi, pero no se como. De momento llevo con el contacto cero desde que salió de mi cada, y me está volviendo loca no llamarle ni nada, y mucho más el hecho de no saber nada de él, de si realmente piensa en mi o no. Quiero hacer las cosas bien, pero no se como.
Muchas gracias por todas vuestras respuestas, y siento todo este tostón.. :'(
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