Ya me lo dijo hace un año y nos separamos. Ella se fue dos meses a otro país pero con billete de vuelta, diciendo que quizá la separación ayudaría. Volvió y todo parecía haber cambiado, era como al principio, yo gané confianza en la relación de nuevo y ahora el otro día me acaba de decir que otra vez se siente insegura y que no siente lo de antes. Parece que da por hecho que quiere dejarlo pero tiene miedo de irse sola y a veces incluso duda de si es la opción correcta. Sinceramente, no creo que tenga posibilidad alguna y creo que está todo el pescado vendido. No quiero autoconvencerme de algo que ya no hay, pero ya se sabe que, al igual que no controlamos nuestros sentimientos, tampoco controlamos nuestra esperanza, y a la menor palabra o frase que parece querer decir lo contrario, nos aferramos a ella como un clavo ardiendo. A partir de ahora toca borrón y cuenta nueva, pero le temo al día en que se lo lleve todo y duerma yo solo en esta casa cargada de recuerdos de ella.
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