|
Usuario Novato
Registrado el: 18-September-2006
Mensajes: 1
|
Estoy contando esta historia sobre todo por ella. Ella que es mi fuente de inspiración, mi fuerza, mi felicidad y la luz de
mi vida. La cuento porque se cuanto le gustaría ver publicada en Internet nuestra historia, nuestra novela particular de
amor, y este es mi regalo para ella que lo es todo para mi y que se merece lo mejor de mi y de la vida. Yo simplemente soy un
joven cubano de 26 años que tuve la dicha inconmensurable de conocer a la mujer de mi vida durante una sesión de Chat en
Internet y que a partir de ese momento mi vida cambió felizmente o mejor todavía, a partir de ese momento volví a nacer a una
vida llena de fe, amor y esperanza. Ella es la que hizo mi milagro, la mujer más hermosa y más tierna del mundo, mi talismán,
mi sangre, mis ojos, mi conciencia, mi más puro amor.
Fue una mañana del día 13 de marzo de este año 2006 que por un capricho del destino me senté a la computadora de mi oficina
y me conecté a una sala de conversación de latinos del yahoo Messenger. Incluso ese día yo estaba enfermo y por poco no voy a
trabajar pero algo me impulsó a conectarme y entablar conversación con Linda de la primera vez. Debo decir que nuestra
historia está llena de números 13. Si, no se asombren, ese número que casi todos consideramos de mala suerte fue el que en
realidad nos trajo la bendición. Nos conocimos por Chat un día 13, también un día 13 nos conocimos personalmente y nos
besamos por primera vez, ella tiene 39 años y yo 26, es decir, que nos llevamos 13 años y así hay muchos ejemplos más. Razón
de sobra para que yo considerara a partir de ese día al número 13 como signo de buena suerte y cosas lindas. Como les dije
ese día 13 nos conocimos, ella también era cubana pero estaba viviendo fuera de Cuba y bastante lejos de mí. Eso fue lo que
primero nos impactó y luego nos unió y a partir de ese instante mágico no nos hemos dejado de hablar de 8 a 10 horas diarias
y no se asombren porque a los dos nos parece poco y quisiéramos tener más tiempo para dedicarnos. Linda me contó toda su
vida, sus secretos más escondidos, sus sueños, sus pasiones, incluso las cosas que nunca nadie supo sobre ella. Yo le abrí mi
pecho y sin ninguna vergüenza ni timidez le hablé de todo y puse mi vida ante sus ojos como nunca había echo con nadie. Entre
nosotros surgió una confianza total y así pude conocer que ella mantenía una relación con un hombre a quien no amaba, conocí
todas sus virtudes y defectos, ella conoció los míos y así nos fuimos enamorando uno del otro. Nuestra situación era bastante
delicada porque yo vivo en La Habana, Cuba y no tengo facilidades para viajar al extranjero. Es decir, sería ella la que
tendría que dar el paso de venir a conocerme personalmente. Por otra parte solo podíamos chatear mientras yo estuviera en mi
centro de trabajo porque fuera de ese horario no tengo acceso a Internet, mejor no pregunten por qué. Además había algo que
para ella aún es motivo de dolor y es que no puede darme hijos y siendo yo tan joven según ella debería importarme formar una
familia como todo el mundo. Que lejos estaba de adivinar la verdad, que yo por ella soy capaz de dejarlo todo y vivir a su
lado como el hombre más feliz de la Tierra.
Debido a la confianza tan grande que desarrollamos Linda me dio el teléfono de su madre aquí en La Habana y comencé a
visitar a su familia. Conocí a su mamá, a su hermano, sus sobrinas y su cuñada y tengo que decir que ellos me aceptaron como
uno más de su hermosa familia. Desde entonces visito la casa de su madre regularmente y la quiero y la respeto como a mi
segunda madre y a su hermano lo tengo como hermano mío también. Pasamos bastante tiempo juntos y a través de mi ellos tenían
noticias de Linda pero siempre sin decirles una palabra sobre el amor que siento por ella y lo importante que es para mí.
Nuestro amor siempre fue algo escondido pero eso no le quitaba ninguno de sus atractivos ni impidió que llegáramos a
necesitarnos hasta al punto de que los fines de semana como no podíamos hablarnos fueran completamente vacíos e inútiles para
los dos. Ella me llamaba regularmente a mi casa por teléfono, nos enviamos fotos de las cuales yo poseo unas 500 y pico o 600
solamente de ella y en diversas posiciones. Inventamos muchísimo para burlar las regulaciones impuestas por el director de mi
empresa el cual no entiende nada de amor y mucho menos si este es por Internet con el objetivo de acercarnos más y más y no
dejarnos caer en la rutina que hiciera nuestra separación aún más dura. Y triunfamos.
Finalmente 5 meses después de habernos hablado por primera vez, un domingo 13 de Agosto de este mismo año, Linda llegaba al
aeropuerto de La habana para visitar a su familia y principalmente para conocerme en persona y observar que sensaciones
despertábamos el uno en otro en la vida real. Yo estaba con sus familiares esperándola en el aeropuerto y en realidad sentía
bastante miedo de que llegado el momento del encuentro yo no le gustara como quería gustarle y todo se echara a perder por
eso. Yo si estaba seguro de que ella me encantaría y de que me pasaría lo que en realidad me pasó, que desde el primer
momento que la vi avanzando hacia nosotros con su paso firme, desenvuelto y gracioso me hechizó completamente y desde ese
instante me entregué rendido completamente a sus encantos. Porque ver a Linda en vivo y en directo es un encanto para los
sentidos. Verla sonriendo, moviéndose, hablando, observar sus muequitas graciosas, la forma en que eleva su ceja derecha
picaronamente, pero sobre todo tener sus caricias, sus besos, sus abrazos es algo inigualable que me fascina por completo.
Aunque ya nos habíamos visto por fotos yo todavía estaba inseguro sobre si yo le gustaría pero esa inseguridad se desvaneció
completamente cuando me abrazó por primera vez en aquella terminal de aeropuerto y me besó por primera vez.
Luego todo fue sencillamente maravilloso. Ella conoció a mis padres y enseguida se convirtió en la hija que nunca tuvieron.
Compartimos momentos de felicidad completa en esos 20 días que se pasó en Cuba. Yo no descansé ni un sólo instante en ese
tiempo y sin embargo nunca me sentí cansado. Estuvimos varios días en la playa junto a su familia, salimos muchísimo juntos
en las noches y nos quedamos en mi casa con lo que pude tenerla casi a tiempo completo y compenetrarnos de una manera tal que
cuando no estábamos juntos nos sentíamos mal. Todo lo hicimos juntos, desde comer en el mismo plato o beber en el mismo baso
hasta bañarnos juntos y muchas cosas más que dejo a la imaginación de ustedes mis lectores queridos. Fue un sueño echo
realidad para los dos y la cantidad de fotos y videos que nos tomamos juntos da perfecta cuenta de eso. El único día triste
fue el de su partida y creo que ese día ha sido el más triste de toda mi vida. Antes de que se fuera intercambiamos
recuerdos, ropas y cosas que más adelante cuando estuviéramos solos nos recordaran los instantes preciosos que pasamos
juntos. Ella se fue con la promesa de regresar el año próximo a estar un mes conmigo e incluso casarnos porque ya estaba
sintiendo lo mismo que yo sentía desde hace mucho tiempo, que no podíamos vivir ya el uno sin el otro y nuestra felicidad
solo estaría si logramos vivir juntos en el lugar que fuera, aquí o allá a mí me da lo mismo porque sólo necesito estar con
ella y lo demás ya está en un plano muy muy muy secundario.
Les juro que estos días que estoy pasando solo después de que Linda se fue han sido los mas terribles de mi vida. La
extraño con locura y a veces temo volverme loco de verdad. Pero en mi corazón está la decisión inquebrantable de esperarla
todo el tiempo de mi vida si fuese necesario y sólo sueño con el día de nuestro próximo encuentro. Mi casa ha quedado llena
de su presencia, sus recuerdos están por todas partes, sus olores, sus sonrisas, sus fotos se encuentran en cada rincón de
las 4 paredes de mi hogar y eso me hace más fácil levantarme cada día para ir al trabajo donde se que la encontraré bien
temprano ya conectada al Chat esperándome para darme los buenos días y contarme como me extrañó y lo mucho que me ama. Porque
otra cosa, con este viaje ya comprendió que me ama y así mismo me lo hizo saber y al decírmelo me hizo el hombre más feliz
del mundo. Es increíble como una sola frase de ella me remonta a las alturas y me hace tocar las nubes con mis manos y besar
las estrellas.
Ahora nuestras vidas tratan de seguir su curso normal. Yo me levanto cada mañana para conversar con ella en el trabajo,
ella atiende su hogar y estudia mucho para lograr su independencia. Yo continuo visitando a su familia constantemente y los
dos solamente pensamos en encontrarnos otra vez y hacernos marido y mujer. Es cierto que comparada con otras que hemos podido
leer nuestra historia es corta, sólo cuenta con 6 meses, pero es muy fuerte en cuanto a sensaciones y cariño. En estos
momentos estamos más enamorados que nunca y por eso también me decidí a contarla y demostrar que el amor por Internet si
existe y es totalmente posible. Que es un amor sacrificado y duro es cierto, pero cuando de verdad se encuentra a la persona
perfecta para compartir la vida como en mi caso sucedió es una bendición del cielo y se disfruta, se siente y se sueña mucho
más que en una relación normal. Por eso yo invito a todos aquellos que puedan tener alguna historia como la nuestra y tienen
recelos todavía a que se decidan y se dejen llevar por la situación y a que amen con todas sus fuerzas y rompan las barreras
de los prejuicios porque quizás allí esté esperándolos el amor de su vida disfrazado y sin rostro tras la pantalla de un
ordenador saludándolos con una simple frase de "Hola Buenos Días" que más adelante podría convertirse en un "Te Quiero" o
mejor todavía en un "Te Amo Con Todas Mis Fuerzas".
Linda, a ti te envío todo mi amor más puro y sincero. Espero que ahora disfrutemos mucho los dos mientras leamos juntos
nuestra historia de amor ya publicada en Internet como a ti te gusta. Te amo enormemente vida mía, me fascinas, es una cosa
que no está en mí.
|
Mode Lineal
