Jejeje perdona que me ría, no es malas, pero es que esa sensación que tienes me parece muy tierna, y personalmente la echo de menos.
Creo que nos ha pasaso a todos que nos gustara alguien sin conocerle, sobretodo en época de estudios en general.. De esos que te imaginas los besos, las caricias, cómo será, qué le gustará.. En definitiva, idealizar y soñar con situaciones idílicas, tontas, románticas, perfectas..
Creo que es muy típico, y muy bonito.. Sobretodo viéndolo ahora, que en la mayoría de casos no pasaba nada, y aunque en el momento me parecía un mundo y apenas podía pensar en otra cosa, al poco tiempo llegaba otro que me hacía ilusión y todo lo demás se desvanecía.
Lo de los rasgos te medio entiendo .. Cuando alguien tiene un rasgo que me parece atrayente, como que se difumina y me cuesta tanto fijarme para no parecer idiota, que al final, por decir algo, no se decir de qué color son sus ojos. No me pasa a menudo, ni de manera tan marcada como a ti, pero lo entiendo. No se si es algo que le pase a más personas.
Al tema.. Tres días sin poner pie en la biblioteca no es tanto, y no tiene que significar necesariamente que te esté evitando, ni mucho menos que crea que eres una acosadora.. Has mirado, y ya.. Si eso es de acosador, todos lo somos. A ver, matices, pero no creo que le mires con binoculares, babeando, y frotándote las manos
Ten paciencia y en lo peor piensa que estás igual que antes de verle.. Ni se para el mundo, ni tu vida, y además tienes una buena excusa para tratar de no darle vueltas: los estudios. No te adelantes a planear un encuentro, y espera a verle, sé natural.
Yo te recomendaría que no hablaras con sus amigos hablando de él... Entiendo que por esas edades es bastante habitual, pero creo que las cosas, cuantas menos personas haya implicadas "jugando al telégrafo", salen mejor. Piensa que pueden, queriendo o sin querer, enviarle un mensaje contradictorio, meterle cosas en la cabeza, o simplemente le puede parecer inmaduro que en lugar de dar la cara andes investigando a sus espaldas mediante sus amigos. Son sus amigos precisamente, no los tuyos, y yo no me fiarìa de darles muestras de interés a ellos.
Espera a verle y coge el toro por los cuernos.. Hablale, quizás aprovechando el tema biblioteca, estudios, etc. Conoce de primera mano si realmente está ocupado, en lugar de basarte en lo que te digan otros. Saluda, siempre, a él en especial y a todos.. Es la mejor manera de entablar contacto, presentarte, y no hacer tan rara la situación de un día hablar más con él.
Y ya cuando te veas más animada, más segura de ti misma, y veas que él también propicia los Saludos, las conversaciones, o lo que sea.. Pues te lanzas a preguntarle cosas más personales o directamente quedar fuera del ambiente de los estudios.
No pierdes nada por intentarlo.. Lo peor que puede pasar es que no le gustes o ande muy liado como para incluirte en su vida.. Y tan malo no sería, pues te permitiría ir olvidándote y pasar a otra cosa.
Ánimo!