Nadie te lastimará si tú pones ciertas barreras para que no lo hagan.
No me refiero a que te vuelvas una piedra y no dejes que nadie se te acerque, pero analizar qué es lo que haya podido ir mal en anteriores ocasiones para que luego te dejaran con esta sensación.
Mi caso, por ejemplo, es que soy una persona super sincera y directa con aspectos de mi vida que a la hora de conocer a gente nueva quizás es mejor guardarse hasta poder confiar plenamente. En algunos casos, revelo mis miedos e inseguridades esperando que la otra persona me comprenda, pero el problema como bien dices, que hay mucho malintencionado, y siendo tan abiertas pues favorecemos que dichas personas tengan todas las armas para aprovecharse, atacarnos donde realmente nos duele, y cuando ya han sacado provecho se marchan sin dejarnos nada.
Así que haz eso, plantéate si quizás a ti no te pase lo mismo, y aprende a guardarte para tí algunas cosas, hasta que realmente conozcas a personas a las que merezca la pena confiarles todo de ti, bueno y malo.
|