Me da pánico el sexo oral

Iniciado por Elocin

Yo creo que es normal si recientemente te has estrenado en el sexo (aunque hablas de tantos chicos que no se... ¿eh? -bromita, puedes hacer lo que gustes-)

Yo tardé cerca de 8 meses para hacerlo con mi pareja después de perder la virginidad, me refiero al sexo oral. Me daba miedo hacerlo mal, me daba también pudor y asco, para qué mentir. Y a que me lo hiciera a mi, pues muchísima verguenza y lo típico de si sabré u oleré bien..


Seré explícita.

Para empezar cada mujer es un mundo, y yo sigo pensando que ni mi sabor, ni el sabor de los hombres, es algo que digas "guau, que rico!". Tampoco diré que sea desagradable como para vomitar, pero a mi personalmente no me gusta. Lo que me gusta es provocar placer, y obviamente obtener placer, por tanto, el tema del sabor es un mal menor que se compensa con creces.

En mi caso necesito confianza, más para el sexo oral, que para un coito. No es algo que suela hacer de primeras, pues necesito conocer la rutina higiénica de la persona, y no he tenido ningún reparo en pedir una ducha "antes de..", tanto por mi, como por la otra persona. Creo que siempre es mejor que lo que se vaya a comer esté limpio, y además puede ser un juego previo muy curioso el hecho de lavarse el uno al otro.

No estás obligada a hacer algo que no quieras, pero yo sigo la máxima de "primero probar, luego decidir". No todos los hombres son iguales, y quizás con tu pareja sí te resulte más placentero, tanto dar como recibir.

Lo más importante es la comunicación.. Yo quiero pensar que si estás preparada para acostarte con alguien, lo estás para hablar de cualquier cosa de índole sexual.. Y con esto te quitas de muchos problemas y dudas. Quiero decir, no tienes que dudar a la hora de preguntar qué prefiere, qué le gusta y que no. Y tampoco callarte lo que te guste a ti, o lo que prefieras que no siga haciendo.

Como decía, al ser cada persona diferente en cuanto a puntos erógenos, fantasías.. lo mejor es comunicarle a tu pareja lo que está haciendo bien o lo que puede mejorar y cómo. No hay mejor manera obviamente, que intimando contigo misma para conocer mejor tu cuerpo, los movimientos que te gustan más, cuánta presión o rapidez. Podrás indicarle a tu pareja cómo quieres que te haga un oral de mejor manera si conoces tu cuerpo, vaya. Y él obviamente podrá hacer lo mismo contigo.. ¡y ambos salís ganando! Lo que no podéis hacer es tomaros una crítica o un consejo como un ataque con la intención de menospreciar vuestro trabajo. Estamos hablando de llegar a complementaros bien en la intimidad, y como en todo, hablar es importante.

Y luego hay algo que respecta únicamente a ti, y es el hecho de quitarte verguenzas y miedos. Yo, como tú, me negaba a que me dieran sexo oral por si les daba asco, por si ese día podía oler/saber mal (como tu dices, a pesar de una buena higiene), por si mi vagina resultaba "rara", y un sinfín de tabúes y verguenzas. Eso es algo que tienes que quitarte de la cabeza.. repito, tienes confianza con tu pareja y le puedes dejar claro de antemano que si algo le disgusta no lo haga.. pero no te anticipes y permite que sea el hombre el que elija.. igual que tú tienes el deber de elegir si practicarle o no sexo oral. Las ganas tienen que ser de ambos, no solo tuyas o suyas.


Para empezar, si tanto preocupación te da el tema, lo que puedes hacer es incluir aceites de sabores. Obviamente evitar alimentos ácidos ayuda.. no por nada se dice que "somos lo que comemos". Evitar absolutamente comer espárragos cuando queráis tener sexo oral (da un olor muy fuerte, lo puedes comprobar al orinar). En definitiva, comer piezas de fruta puede alterar el sabor de los flujos y hacerlos más agradables.

Como último remedio, ni tu ni él tenéis porqué "saborear" nada siempre que os limitéis a ciertas zonas... Me explico. Tú no tienes porque "llegar hasta el final" oralmente cuando se lo haces, y te evitas saborear nada. Al menos al principio, mientras le pilles práctica, ya que a mi la idea del orgasmo masculino era lo que más me echaba para atrás. Y en cuanto a él, puede limitarse a la zona de tu clítoris oralmente, y darte placer con las manos alrededor de la vulva.

¡Pero hablad! Eso es muy importante.