Recuerdo que mi madre una vez leyó mi diario, fue tremendo, sentí una decepción tan grande...
Hay cosas que son privadas, personales, no las escribimos para que las lea nadie, las ponemos para una determinada persona en un momento determinado y nadie debería leer eso ni tener acceso a el contenido de nuestra parcela intima.
Nunca se me ocurriría mirar el diaria de mi hija, ni mirarle una carta que ha recibido, ni un mensaje que le llega al móvil y es mi hija, pero es una persona con una vida y con una intimidad que tengo que respetar.
Por la misma razón jamás miraría el móvil de mi pareja, y yo pido lo mismo que doy, y esto no es "nada debo nada temo· ni gaitas por el estilo, es un derecho a tener una parcela privada que está reconocido en la Constitución y en el Código Penal.
Otra cosa es que carezcamos de unos mínimos principios de respeto y nos de lo mismo ocho que ochenta y nos dediquemos a husmear en los móviles de nuestra pareja como si fuéramos los dueños de su vida.
A no ser que haya un acuerdo de que los móviles y todo lo demás son como el pito de un sereno y nos importe un pimiento que los mire nuestra pareja o un vecino que pasa por ahí, es un delito hacerlo.
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