Cita:
Iniciado por fabita
bno...en realidad nunk he escuchado eso... xD
pro bno, tal vez si lo conocieras me darias la razon xq es un tipo q no vale la pna y ...pasa diciendo cosas dem...asquerosas
|
seguramente te daría la razón, y seguramente otros usuarios que también te dijeron que tu problema no pasa por lo desagradable que pueda ser el tipo, si no por lo mucho que te ocupa la cabeza.
fabita, intentá ser lo más honesta que puedas con vos misma, nosotros no contamos.
sabés cuantas veces uno termina saliendo con alguien, que algún tiempo antes, nos parecía imposible... y algún tiempo después: increíble... (como pude yo...)
lo único que tienen en común el amor, con los caprichos (los enamoramientos pasajeros), es que al formar parte de nuestra vida emocional, no son muy predecibles. y cuando se es muy joven, menos aún. no hay mucho con que comparar.
el amor... los enamoramientos pasajeros... al encontrarse tan inmersos en lo emocional, tienen mucho más que ver con nuestro subconsciente, que con la razón y con la lógica.
nos enamoramos "a pesar de...", aunque luego experimentemos dolor.
el amor y los enamoramientos pasajeros, comienzan casi siempre como un estado de trance hipnótico; durante un tiempo, al menos, nos dejamos invadir por cierto embrujo... claro que muchas veces podemos llegar a resistirnos... y otras no.
muchas veces lo que nos produce rechazo, también en algún profundo lugar, nos produce fascinación.
no te estoy diciendo que fatalmente vayas a terminar enamorada, del tío este, no.
tal vez hayas venido hasta aquí, porque justamente querías encontrarte con otras voces, con otras experiencias, distintas a las de tu entorno de siempre.
otras voces y otras experiencias que puedan aportarte un sentimiento de libertad (la libertad que otorga el anonimato) donde intercambiar... y hasta confrontar llegado el caso. todo lo sirva para enriquecer tu mundo interior.
si bien las experiencias son en principio intransferibles, algunas veces, nos encontramos más predispuestos a aprovechar las experiencias de otros. sobre todo cuando intuimos que que un peligro nos acecha. y queremos escapar... es todo un signo de crecimiento.