Encontrarte de repente con la mirada de alguien es muy común, tanto si son amigos como que no, y bueno, cuando mantienes fija la mirada que se produjo por "un encuentro casual de los ojos", te sientes como dices, porque consideras que estás conectando con la otra persona, y si te llama la atención crees que la conexión es por algo y se empiezan a maquilar una serie de ideas en la cabeza que satisfacen a la persona.