Abro los ojos , me levanto para revisar la hora en el móvil como cada día, son las 16:38 , vaya! He dormido demasiado ,suelo cerrar los ojos diariamente entre las 4 y las 6 de la noche,pero ayer me metí a la cama antes de lo normal, si, ayer no fue un buen día.
Revisando el móvil veo que unos amigos han quedado para jugar al baloncesto,me apetece lanzar unos tiros y divertirme un rato pero que pereza sin comer y con este frío.
Salgo a la cocina y no hay comida preparada,ayer no fue un buen día para alguien mas en mi casa, que pereza hacer de comer ahora recién despertado.
Me tumbó en la cama a jugar un rato con el móvil, pero el wifi no llega bien a la habitacion y no puedo perder el tiempo con el móvil como tanto me gusta,suficiente para empezar a maldecir mi "mala suerte" .
En un arranque de energía positiva decido ir a jugar al basket un rato sin comer ,me pongo lo primero que encuentro medio abrigado y cómodo para jugar y salgo camino a la cancha, intentando esquivar siempre casa de los padres de la persona "culpable" de toda esta tontería de texto, supongo que si no la veo en unos cuantos años la olvidaré.
La casa de sus padres justo esta en la ruta de mi casa a la cancha así que aunque no he pasado por la puerta ,he caminado por las calles cercanas ,por donde solíamos pasear y donde empecé a sentir eso que llaman amor, o eso creo , he recordado una anécdota de una vez que paseabamos de la mano y nos cruzamos a su madre con una tía suya ,ella se giro y se escondió en una calle rápidamente , aún así su madre la había visto y empezó a llamarla , ella apareció con los mofletes más rosados que de costumbre , su tía empezó a reírse y yo me fui como si no tuviera nada que ver, fue una escena ridicula pero a mi me pareció maravilloso y estaba seguro que sería una anécdota que le contaría a mis hijos y mis nietos junto a ella. Me ha dado tiempo a arrepentirme por no haber sido más valiente en aquella ocasión y haberme presentado a su madre ,ella amaba a su madre más que a nada en el mundo y quizás habiendome ganado la confianza de su madre hoy no estaría estaría escribiendo esta historia.
Llego a la pista y hay 3 amigos jugando , estamos un rato tirando y a la hora o así dos de ellos se van y nos quedamos otro chico y yo solo,al ser dos tiramos con más frecuencia y empiezo a calentar la muñeca ,estoy disfrutando olvidando el mal día de ayer , el mal mes , el mal año.
Le paso el balón a mi amigo , lanza y voy a por el rebote y es en ese momento es cuando se para el mundo ,mi vida pasa demasiado deprisa los últimos años pero ahora mismo siento el frenazo podría contar las centésimas de segundo,el pecho parece comprimirse , siento el estómago vacio y no es por no haber comido nada , es un vacío que enseguida invade mi cuerpo.
Ahí está ella andando con una amiga ,con esa divinidad, esa sonrisa perfecta que te hace olvidar cualquier otra cosa de este mundo, en esos segundos he perdido el balón de control como si fuera la primera vez jugará , pero sólo estaba pendiente de ella de asegurarme de verla el tiempo suficiente para poder seguir soñando con ella otros 10 años .
Estoy seguro de que ella no me ha visto ,o por lo menos ha hecho como que no me ha visto, y ahí me he quedado con mi amigo hablandome y yo asintiendo como si lo escuchara y en realidad estaba pensado como no ha podido sentir mi presencia ,el porque no hemos podido cruzar una mirada de afecto,el porque para mi lo es todo y para ella seguramente casi ni existo. Este vacío que me ha recorrido el cuerpo desde ese momento hasta este mismo que estoy escribiendo, me ha llevado a rellenar el día con la típica crisis existencial y las dudas del rumbo de mi vida ,con la correspondiente búsqueda de destinos para hacer voluntariado y también me ha llevado a escribir esto al final de este día tan polarizado, por una parte maravilloso verla 10 segundos y animarme a escribir esta auto terapia, pero por otra parte el día que vuelvo a recordar que sin ella mi vida no tiene rumbo.
|