Hace ya más de un mes que te fuiste, y todavía hoy, me sigue pareciendo mentira que ya no estés.
Todavía hoy, me parece un mal sueño que estés con tu nuevo chico, que demuestres tu felicidad por ahí a los cuatro vientos para que yo me entere de que ahora, justo ahora, estás cumpliendo un sueño.
Todavía me parece mentira el despotismo y la indiferencia que sientes hacia mi, el como puedes obviar todo lo bueno de una forma tan rápida, tu facilidad para recrearte en los errores que pude cometer.
Pero no, no es un mal sueño, es una realidad, tan triste como la vida que me has dejado desde que te marchaste.
|