Ay si me traen muy buenos recuerdos este post de cuando jugaba al baloncesto en un equipo mixto y una chica me gustaba (bueno sinceramente me sobreencantaba). Al comentarle mis compañeros que me gustaba esa morenaza (sí, de niños somos muy superficiales lo sé) me insistieron que se lo pidiera durante el entrenamiento. No sabía el por qué se aferraban a que le invitara a salir en ese mismo instante. Entonces mietras tirabamos unas canastas mis glándulas suprarrenales me abastecieron de adrelalina para tener agallas y así confesarle que me gustaba mucho e invitarle a salir, y VOILA!!! recibí a mi derecha un impacto de pelota de baloncesto dura como granito a una velocidad bastante considerable, al que me alcanzó al oído sonando ese PIIIIIIIIIIIII con el atontamiento que conllevaba, en ese mismo instante pude discernir entre el agudo pitido unas risas maquiavélicas, acto seguido pude percatarme fugazmente que el tío que me lanzó el pelotazo que en ese mismo instante se me acercaba como un perro rabioso con sed de sangre era ni más ni menos que el novio de la chica... ¬_¬"
Me zurzó bastante bien y me quiero ahorrar los exquisitos detalles que se desenlazaron en aquel lugar en los minutos que siguieron
eso sí, se mancho de sangre que no era suya, imaginate un servidor como acabó... :S
Moraleja no te lances sin conocimiento de la situación a lo que podría añadir que jamás de los jamases hagas caso de tus "amiguitos" que te ofrecen confianza porque van buscando que te partan la cara para descojonarse a gusto "saden froide"