El lado bueno es que,, aunque tengas que rechazar muy a menudo, al menos tienes la posibilidad elegir entre muchos.
El mayor riesgo que veo es que empieces a pensar que todos los hombres somos iguales. Si ya asumes que buscan sólo sexo sin conocerles, es muy probable que los que tengan esas intenciones se alejen rápidamente. Supongo que ahí está el juego de saber cuándo y cómo rechazar.
Puede que también necesites mostrar adecuadamente tu personalidad. Si no le llamas la atención en ese aspecto es más difícil que sepan lo que puedes aportarles realmente. En el caso de que ese fuera el problema, tendrías que "luchar" contra el estereotipo de mujer florero, por muy machista que sea.
Quizá te interese también conocer hombres en otros ambientes, o dar oportunidades a hombres menos lanzados.
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