Hace dos meses conocí a una chica. Le fui mostrando interés poco a poco y con mucho respeto y discreción para no llamar la atención de los demás. Notaba que ella se sentía a gusto y cómoda con mi trato. Yo diría que hasta ella sospechaba que me estaba enamorando y que trataba de llevar las cosas al paso y bajo perfil.
Hasta que se cumplió el primer mes. Empecé a ser más obvio en mis intenciones porque quería saber con seguridad si ella sentía algo por mí y no correr el riesgo de estar enamorándome sólo. Por lo que inmediatamente, ella se alejó. Ya no desayunaba ni almorzaba conmigo en las horas que teníamos libres. Todo cambió desde el momento en que le dije que ella era la más bella de la universidad. Me evadía, evitaba a toda costa estar conmigo o cerca de mí.
De pronto, yo tomé la decisión de tratarla para cosas necesarias y de no volver a piropearla, ni a enamorarla ni a manifestarle lo que siento al verla. Me distancié totalmente pero tratándola incluso con más respeto, distinción y simpatía que antes, pero se notaba a kilómetros que yo lo hacía a fin de quedar como buenos amigos y seguir en busca del amor en otra mujer.
Ante mi actitud de que, aunque ella me rechazó, yo seguí con mi vida y me empezaba a interesar por otras chicas y a darle prioridad a mis proyectos personales con una actitud muy positiva, ella comenzaba a acercarse. Me hacía preguntas estúpidas. Sentía con el reflejo de la mirada que ella me veía y se quedaba observándome. En ocasiones, la veía nerviosa ante mi postura firme y de carácter honesto. Un día me trataba de maravilla y al otro día como si fuese su peor enemigo. Simplemente, le di su espacio y aproveché mi libertad.
En fin, ¿Qué crees ha pasado? ¿Será que al no conocerme tanto no quiso ser tan directa como yo lo fui con ella? ¿Será que yo le gustaba pero era muy temprano para manifestarlo? ¿Rechazarla la hizo actuar de esa manera? ¿Qué me recomiendan?
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