Yo creo que él solo hecho de preocuparse de lo femenino y masculino es una discusión sin demasiado fin. Son siempre juicios de opinión. La valoración de qué es cada cosa, y que no corresponde, va a cambiar acorde a la época, región (occidente, este, etc) y quien sabe que más. No hay un criterio unificador.
En vez de eso, no es acaso mejor ser un humanista integral que defienda lo que quiera a nivel de humanidad, en vez de géneros? (mediando igualdad de oportunidades, etc.) Por qué limitarse?.
O mejor aún, saltarse las definiciones y simplemente ser lo que a uno de la gana, con respeto mutuo, y de paso integramos a los bichos, reptiles y chuchos a la discusión de derechos.
Ratas no porque son feas. Esas deben morir.
|