Usuario Novato
Registrado el: 28-August-2006
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Hola,
Mira, mi historia fue parecida a la tuya. Nos conocimos en una noche de verano, él era todo lo que yo quería ser, y viceversa; tan diferentes que él estaba metido en miles de problemas y asuntos (drogas, cocaina, etc) y yo ni siguiera fumaba. Pero la atracción entre dos personas no distingue culturas ni maneras de vivir, la atracción no es nada más que pasión, química, complicidad. Una mirada y estás perdida...
Él vivía a 700 kms de distancia, yo lloraba todo el tiempo, porque quería estar con él, era mi alma gemela, sentía que era capaz de cualquier cosa por conseguir estar juntos... pero para él no era más que atracción, comunicación, lo que se dice un rollo, y una amistad preciosa que fue surgiendo con el tiempo. Sufri mucho por intentar comprender su mundo, por intentar alejarle de las drogas, hicimos muchos viajes los dos para vernos, porque cuando estabamos juntos...la pasión era tan fuerte que hasta el dolor se confundía con el placer!
Pasó año y medio, yo perdi muchas oportunidades con otros chicos, obsesionada por un chico que obviamente no me quería de la misma manera que yo a él. Luego empezó a contarme que le metia mano a amigas suyas, que se iba de ***** con los amigos...mil cosas. Y yo lo soportaba todo porque estaba enganchada de él, hiciera lo que hiciera yo le justificaba, y le perdonaba, sentia que le necesitaba y que no existiría nadie como él... que nunca más volvería a enamorarme en toda mi vida.
Me vino una racha de problemas serios, y él no estuvo allí. Cuando tienes problemas ves quien está contigo de verdad y quien no. Entonces nuestra relación desapareció, la realidad se imponía al sueño. Estuvimos un año sin vernos, hasta que en noviembre de 2006 dió señales de vida. Vino a verme, estuvimos una semana juntos, y por fin me dijo que me quería. Justo cuando yo ya no estaba enamorada de él. Y ahi acaba mi historia. No existe un consejo para esto, yo no me arrepiento, será siempre el gran amor de mi vida, y lo recordaré como eso.
Algunas historias hay que vivirlas, aunque el final no sea el más adecuado, aunque la familia se oponga, aunque tus amigos te digan que no te conviene, aunque él mismo te diga que no debeis veros más...
No sufras por el futuro, analiza bien qué tienes con él en este momento y vívelo, disfruta de ese amor. Eso sí, vive el presente, no sufras intentando ser su novia. Sois muy incompatibles y no funcionaría nunca, en el fondo seguro que eso ya lo sabes. Que dure lo que tenga que durar, que acabe como tenga que acabar, pero lo importante es vivirlo. Mucha suerte, duele mucho, pero es así.
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