A ver: mil veces he leído en este mismo foro que una amiga a la que le declaras tu amor por sorpresa se puede sentirse traicionada y pensar, precisamente, que has estado todo el tiempo engañándola para meterla en la cama.
Esto es justo lo que ha pasado, y es a lo que uno se arriesga cuando confiesas tu amor "porque debes hacerlo". El amor se debe confesar cuando se ven indicios, no por sorpresa.
Tú le dijiste que no pasaba nada, que lo entendías, pero has sido tú quién que ha cortado una amistad de dos años. De repente ella se queda sin esa amistad, y además le das la razón cuando dijiste que no pasaba nada y sí que pasaba.
Realmente ella debería entender tus tiempos, incluso se más considerada, pero imagino que le rabia que todo se haya ido a la porra por tu atrevimiento. Es lo que pasa cuando decides declarar tu amor aunque pierdas la amistad. Pues bueno, ya está: ya no tienes la amistad.
Es la ley detrás de todo esto. Si te atreves a declarar tu amor por sorpresa a una amiga, ya no hay amistad. Así que tampoco te sorprenda por sus reacciones. Y si tú no tuviste la fuerza de voluntad para guardarte tus sentimientos, no le pidas ahora a ella coherencia con los suyos. Tú te liberas de tu angustia amorosa, haces peligrar la amistad y le pones a ella toda la carga emocional. Y encima ella se debe comportar de la mejor manera posible, como de libro, porque si no es la mala.
Pues no, ella también es una persona con sentimientos que se ha quedado sin un amigo porque el amigo "siente cosas que no puede controlar".
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