Dependencia emocional

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Hola a todos/as:

Necesito que alguien me dé un consejo, temo equivocarme y arrepentirme el resto de mi vida. Sé que muchos no me van a comprender, pero espero que al menos me respeten.

Tengo 33 años, llevo 9 con mi novio. Nos hemos conocido cuando todavía estábamos estudiando, al principio la relación iba bien, a mi parecer, siempre he sentido que él estaba mas enamorado que yo. Para mí no era una pasión desenfrenada lo que sentía, pero era feliz. Los años fueron pasando y como cualquier chica yo quería ir avanzando en la relación, conocer a su familia, irnos a vivir juntos... pero la relación estaba estancada. Él es algo más joven que yo, así que pensaba de tenía que ser comprensiva y tener paciencia.

Tardó en incorporarse al mundo laboral y eso no le permitía independizarse, sabía que en ese sentido no podía contar con él. Así que, me busqué la vida por mi misma, además tenía una cosa muy clara y es que nunca he querido depender de un hombre. A él le pareció un desprecio el que yo me comprase un piso y no contase con él. Pero yo necesitaba independizarme, salir de casa de mis padres, ya que allí no encontraba mucha armonía.

Para cuando me entregaron el piso (dos años de construcción) él encontró trabajo en otra provincia, así que llevamos tres años separados. Con altos y bajos en la relación, discutíamos mucho porque yo necesitaba algo más, quería que viviéramos juntos, hacer planes de futuro, pero él no podía concretar nada porque no sabía cómo le iban a ir las cosas en su trabajo, si tendría que volver o no. Llegamos a un punto de tantas discusiones, que acabó dejándome, estuvimos 6 meses sin vernos, fueron los peores meses de mi vida. Ya que, para mí él era mi vida entera, apenas tenía amigas y me sentía muy mayor para salir de noche y conocer gente con la que hacer amistad. Además soy una persona con muy baja autoestima, y estaba convencida de que me iba a quedar sola en la vida, que nunca llegaría a tener una familia y eso me consumía cada día, no era capaz de vivir mi vida por mi misma.

El caso, es que él quiso volver conmigo, un día me llamó y me dijo que me quería y que no podía olvidarse de mí. Durante el tiempo que estuvimos separados yo conocí a algún chico, me ilusioné con alguno pero no pasaron de simples rollos, por ellos, yo siempre estaba buscando una relación seria.

Ahora que estoy con él otra vez, estoy tranquila, pero sólo consigo eso, estar tranquila pero no ser feliz. Después de todo lo que pasó y de haberme ilusionado con otras personas. Sé que se puede sentir algo más por alguien, a veces, sueño despierta con encontrar a alguien de quien enamorarme de verdad, de sentir un beso de verdad.

Pero lo tengo a él, que me quiere, que se preocupa por mí, ¿qué más puedo pedir?. Y si lo dejo buscando sentir algo más y después no encuentro a nadie que me quiera como él, tengo muchísimo miedo a quedarme sola. Creo que tengo dependencia emocional, sólo consigo estar tranquila cuando tengo pareja, y no doy aprendido a estar sola, la soledad es algo que me consume y no soporto. Lo triste es que vivo sola, cada día me acuesto sola y como sola pero el simple hecho de tener a alguien ahí, de que me llamé por teléfono, de sentirme querida...

Ahora es cuando él pone los medios para que me vaya a vivir en él, que me da las facilidades para que yo deje todo y me vaya con él. Ahora es cuando tengo que tomar realmente una decisión, y no me atrevo. No dejo de pensar en cómo será estar enamorada de verdad. Qué debo hacer??.

Imagino qué pensáis, pero más vale reaccionar tarde que nunca...La verdad que en esta vida el miedo me ha paralizado siempre. Y así me va....

Janeti

Por dependencia emocional excesiva yo he llegado a ver cosas muy tristes que las personas hacen por que creen estar enamoradas de sus parejas, he visto sobretodo mujeres que llegan a perder su dignidad como personas y a perder muchas cosas sólo por eso por el miedo a sentirse solas o por que creen que si su novio-marido las deja se van a hundir tanto que no van a poder soportarlo.

He llegado a ver a la madre de un ex-novio mio, y es cierto, como se dejaba llevar por un viejo asqueroso al que ella supuestamente quiere mucho pero se nota a la legua que es muy insegura y depende emocionalmente de su "novio" que es sólo un viejo que se aprovecha de mujeres como ella, incluida su esposa con la que aun está y de otras amantes que ha tenido.

Esta mujer ha llegado a perder la herencia que heredó de su madre cuando falleció, se ha llegado a entrampar mucho con prestamos y cosas muy fuertes, y además está apunto de perder el piso donde vive o vivía.

De los dos pisos que heredó de su familia ahora solo tiene deudas con bancos y asesores-estafadores que son algunos conocidos de este viejo asqueroso.

Y ella sigue super-loca del abuelo que además tiene parkinson y probablemente demencia de esa de los viejos-dictadores de antes.(supongo que me entendéis con el calificativo)

Hay otras mujeres que también son muy histericas y ansiosas si pierden a su marido o pareja o se va o les dice que se van o algo asi y terminan muy mal incluso con antidepresivos por que fijan su vida entorno a un hombre y si ese hombre les falla o se va o les hace las mil y una, no importa, lo adoran tanto que siguen con él, lo perdonan o hacen lo que sea hasta que vuelve a pesar de las putadas.

La dependencia extrema es muy peligrosa y es mejor tener una buena autoestima y quererse y valerse solas y si tu vives sola y eres independiente y trabajas y estas bien eso es muy importante, no necesitas a nadie para vivir y sobre vivir día a día.

Abrirte a otras personas para relacionarte puede costarte, poco a poco y con tiempo quizás tengas a alguien para intentarlo, si lo consigues bien sino no importa, pero personas para abrirte y relacionarte, para tener amigos y quizas
pareja siempre hay.

Si lo intentas quizás lo encuentres si no pues nada.

Rfael

a mi me pasa tambien y mira que meha mandado a la mierda.. pero si no estoy con ella me sietno morir y muy MUY triste solo cuando los antdepresivos me hacen efecto me olivido de ella un poco

¡¡ que asco de AMOR ojala fueramos robots ¡¡

piasecki

Dices que tienes mucha dependencia emocional, pero sin embargo, vives y has podido vivir sola siempre, tienes tu piso, tu trabajo, y eres independiente, estais en provincias separadas, y eres capaz de sobrellevarlo perfectamente, aunque tal vez en esto te ayude eso que tú misma reconoces, que no estás enamorada.

Sólo habeis estado separados 6 meses y en ese tiempo ya has conocido a alguien más, con lo cual no tienes dificultades para conocer a terceras personas.

Te aferras a alguien por no sentirte sola, porque no tienes amigos y te da pereza volver a empezar ahora, sientes que ya deberías tener una familia, porque ves que la gente al rededor a tu edad ya la tiene y te comparas con los demás (esto es suposición mía nada más).

No sabes la cantidad de gente que conozco en tu misma situación. Crees que te has quedado cosas por vivir, como tú reconoces, diciendo eso de que te gustaría sentir cómo es estar enamorada. Si tienes esa sensación hoy es mejor que mañana para cambiar las cosas. Nunca en la vida se puede dar todo por sentado, muchas veces nos toca dar unos cuantos pasos para atrás antes de seguir adelante. Piénsatelo.

usuarioborrado

chicatruenos

Pues busca terapia chica,nosotros desde aqui poco podemos hacer

La dependencia emocional se supèra pasando tiempo contigo misma,vivir sola y soltera es bueno para tu situacion porque asi te conoceras a ti misma;pero para lograr esto primero tienes que atravesar ese miedo o dolor a la soledad,una vez que lo enfrentas empieza a desaparecer el dolor.

te paso un buen articulo que lei ayer


Un amigo solía decir: ‘quién no disfruta de estar solo, está en muy mala compañía’. Quiero diferenciar entre estar solo y no tener con quién compartir aspectos personales o íntimos y el sentimiento de soledad que es una actitud que no está relacionada con los demás, sino con mi propia percepción de que a nadie le interesa mi vida o mis cosas.

Es muy diferente estar solo que sentir la soledad. Puedo dormir en la misma cama con alguien o estar en una fiesta familiar llena de gente, afecto, calidez y sentir una gran soledad o vacío, o estar en un cuarto lejos de todos y sentir que puedo estar bien, siendo consciente que la vida tiene a veces momentos para estar compartiendo con las personas y momentos para estar a solas.

En nuestra cultura nos enseñan que es doloroso estar solo, que nos debemos sentir mal cuando no tenemos compañía. Si nos gusta o disfrutamos de la soledad, somos un poco raros, se dice con frecuencia: ¡pobrecita esa persona que está sola! Sin embargo, en el día a día y entre más avanza nuestra vida, probablemente pasaremos más tiempo a solas.

En mi vida he aprendido que más importante que con quién estoy o qué hago, es cómo me siento conmigo, si tengo paz o no en mi corazón, mi mente y mis emociones. Porque al final, aunque esté con otras personas, primero debo estar conmigo mismo. Es determinante DECIDIR estar bien y feliz.

Por supuesto que existen situaciones o personas que nos afectan o nos causan dolor, pero tenemos la opción de hacerlo más o menos doloroso, de igual manera, más o menos duradero. Mientras vivas, no importan las circunstancias, cada quien tiene el poder de decidir qué pensamientos o qué sentimientos alimenta y cómo se siente consigo mismo o en relación con los demás.

Imagina que quieres hacer una fiesta para una persona muy querida y muy cercana, para este fin, arreglas con un sinnúmero de detalles el lugar, haces lo posible para que tus invitados sean personas gentiles que tengan buenas palabras y buenos detalles para con el homenajeado y, si notas algo negativo, que va a dañar el ambiente, buscas de la mejor forma, pasar discretamente el momento difícil, para de esta forma crear un ambiente especial e inolvidable para todos los presentes.

Ahora piensa en que tú eres la persona invitada, ¿cómo te gustaría que te recibieran? ¿Qué te trataran? ¿Qué se relacionarán contigo en ese momento? Puedes decidir si en tu interior se permiten invitados desagradables que son los pensamientos negativos, los juicios, los reproches e invitados agresivos como los resentimientos, la envidia, la rabia, la culpa, que son despiadados y destructivos. Si quieres invitados agradables decide con DETERMINACIÓN crear un espacio grato dentro de sí mismo, háblate con calidez y gentileza, trátate en tu interior como tratarías a tus invitados más preciados, háblate de la misma manera, ten cuidado en la forma como te comunicas, resalta en tus pensamientos lo que te gusta de ti, de tu vida, asume la responsabilidad sobre lo que quieres mejorar y reconoce tu fuerza y tu capacidad de hacerlo.

Agradece y valora tus esfuerzos, tus logros, tus afectos, tus momentos placenteros, revívelos con gratitud no con nostalgia o con auto reproches. Y si a veces te es difícil controlar tus pensamientos, haz deporte, pinta, baila, practica una actividad que disfrutes y que consideres constructivo para tu vida. La diferencia entre sentir la soledad o la intimidad, es el tipo de fiesta o de ambiente que creas en tu interior. En la soledad los pensamientos o emociones que invitas y que alimentas en tu interior son de reproche autocompasión y dolor, de miedo e incertidumbre. Para sentir la intimidad tú decides crear un templo en tu interior, en el que los invitados son la alegría, la gratitud, la flexibilidad, la aventura y la confianza de que pase lo que pase, la vida es un regalo maravilloso, en el que cada instante se puede vivir feliz.

Sabes quienes de tus cercanos viven sufriendo y quejándose de soledad o quiénes son aquellos que disfrutan de todo momento, que gozan de su propia compañía, porque aquellos que sienten la soledad con frecuencia son personas que critican, que es difícil estar con ellos, que transmiten ansiedad o angustia, y que con esa actitud acentúan su inconformidad y cada vez menos, otros querrán compartir de su compañía; Mientras que quienes disfrutan su intimidad, emanan tranquilidad, serenidad y alegría; es muy fácil estar con ellos.

¡No necesitas razones para estar feliz, para disfrutar que más razón que pensar que te lo mereces!

Por Carlos Devis

http://www.revistafucsia.com/wf_infoblog.aspx?idblg=11

LoyalFriend1972

Estoy de acuerdo.

Creo que si fuera realmente dependencia emocional, hace tiempo que te habrías ido con él donde estuviese, no habrías aguantado una relación a distancia.

Esto me parece que es más bien miedo a quedarte sola y a no encontrar a otra persona.

Si estás con esas dudas, me da que no le quieres realmente como para poder cimentar una relación en serio a largo plazo. Sería mejor que aprendieras a no basar tu vida necesariamente en estar con una pareja y que supieras sentirte a gusto contigo misma aún estando sola.

Es muy fácil decirlo y huele a tópico a 3 millas, lo sé, pero es que la cuestión clave es esa: que ahora mismo te cuesta muchísimo estar sola, y por eso estás con alguien a quien en el fondo creo que no quieres demasiado, pero para ti es mejor eso que la soledad. Mientras no superes ese miedo a quedarte sola y te enfrentes a la vida con más ganas, me temo que te vas a quedar estancada.

man_ar

Coincido totalemente con Piasecki y LoyalFriend1972, creo yo que no hay mucho más que aportar.

No Registrado

Hola a todos, soy la chica del post. Antes de nada, os agradezco a todos/as vuestros consejos y el respeto con el que me habéis tratado. Sé que tenéis razón, pero no sabéis lo tremendamente difícil que me resulta romper la relación. Os digo de verdad, que tengo un novio maravilloso, que me quiere de verdad, me trata con cariño, que se preocupa de que esté bien. Es una persona con valores, no tiene vicios... Los defectos que puede tener son insignificantes para todo lo que me ofrece.

Dicen que el amor pasional es pasajero, y sí, puedo encontrar a un chico del que enamorarme pero, y si ese nuevo chico no me trata ni la mitad de bien, y si me hace sufrir... ¡sólo porque sienta sus besos! ¿voy a ser más feliz?. Y si después me echo las manos a la cabeza pensando en lo qué he hecho. Llevo 9 años con mi chico y excepto, el año pasado, siempre se ha portado igual conmigo. Y teniendo en cuenta a los especímenes que me he encontrado en mi periodo de soltería, no os quiero ni contar, gente que no quiere compromisos y el que los quiere a mí no me atrae para nada.

Sabéis el dicho este que dice: "La avaricia rompe el saco" (no se ajusta muy bien), pero entendéis a qué me refiero. No se puede tener todo, y hoy por hoy valoro más la tranquilidad. Tengo demasiado miedo para armarme de valor y empezar de nuevo.