Usuario Intermedio
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Buenas chicos, muchas gracias a todos, os he respondido y ahora diré cómo ha acabado la cosa, si es que acaso las cosas terminan.
No sólo por el paso de los años y que estemos hablando de personas distintas, sino que además el tema en cuestión no se parece en nada.
Dicho esto voy a relatar como fue la cosa:
Ella vino de Barcelona a Madrid sólo para hablar conmigo del asunto, la escuché, me dijo que jamás podría en peligro la relación conmigo por ver a un amigo, y que de ser necesario no volverá a ver a ninguno. Que lo que a mi me parece mal, a ella no, que a ella no le importa que yo quede con amigas que fueron algo más y que de hecho prefiere no saber la biografía que llevan detrás. Que ella confía en mi y en ella misma y que por eso no me dió explicaciones, porque no las consideraba necesarias, pero que me las dará si lo considero necesario. Que me quiere y que quiere estar conmigo y que eso lo tiene claro, pero de no tenerlo, no solucionaría sus dudas quedando con otros chicos. Me dijo que a partir de ahora pensará de la forma en la que yo lo hago y así evitará hacerme daño.
Cuando me dijo todo esto me sentí como un monstruo por un momento, pues sé que ella tiene muy pocos amigos, y estaba renunciando a algunos de ellos por mí.
Le respondí que la solución no es que deje de ver a sus amigos, que eso estaría mal, y que además lo acabaría haciendo de todos modos sin que yo me enterase, le dejé claro que yo entiendo que tenga amigos (con la historia que lleven atrás) y que además me parece bien. Que no me parece sospechoso que quede con ex rollo que es su amigo, si no que no me cuente que ese amigo es un ex rollo. También añadí que no tiene que pensar como yo, que me conformo con que respete mi forma de pensar, y los límites que necesito que hayan para que nuestra relación siga adelante. Que, al fin y al cabo, no me parecen tan descabellados, pues no le estoy prohibiendo nada.
Yo le dije que procuraré ser más empático y no pensar que siempre llevo la razón, pero que para mí ser confiable es igual de importante que confiar. Que estoy dispuesto a confiar, pero no a creer. Vamos, que confío en ella pero que tampoco se trata de que me lo ponga difícil.
Hemos seguido con la relación y pasado el fin de semana juntos. Y he de admitir que al contrario que en el hilo anterior, que cada día que pasaba con ella me acordaba de la traición que me había hecho, a pesar de haberla perdonado. En este caso no lo he pensado en absoluto. Y esa es la primera reflexión que he hecho: he pensado mucho más en si perdonarla me convertía en un pagafantas que en si realmente me molestaba el hecho en sí, pues no confío menos en ella, ni me siento menos hombre.
Para explicar mejor lo que quiero decir, confesaré de que en el hipotético caso de que me hubieses dicho que era mejor dejarla, la hubiese dejado...
Y ahora me surgen varias cuestiones. Me preocupa estar poniéndome un cartel a mí mismo en el que ponga: "conmigo está todo permitido".
En algún momento, cuando pensaba en dejarla, tras todo ese dolor de cabeza, surgía una sensación de orgullo, de estar tomando una iniciativa, de estar haciéndome un favor, de estar exigiendo para mí lo mejor. Pero también nacía el temor de convertirme en la pareja que no quiero tener.
Mi último temor es que siento que he tomado la decisión que se esperaba de mí, lo que hubiese hecho cualquiera, y temo pensar que en el fondo ella lo supiese, que tras todo ese palabrerío se escondía un tío del montón que perdona cosas del montón y que no la iba a dejar porque dejar a alguien no es tan fácil (aunque ella me haya confesado haber temido porque la dejara y haber tenido pesadillas que no la dejaban dormir).
Y en fin, le puedo dar las vueltas que quiera, pero el caso es que la decisión está tomada. Si acerté o no, el tiempo lo dirá.
A los que pensáis que he hecho bien siguiendo con la relación. He de ser justo y decir que no me disculpé, que sigo pensando que ella tuvo muchas oportunidades de hacer las cosas bien (teniendo en cuenta que "bien" es en comparación a lo que en nuestra relación algo está "bien" o "mal"). Y si no la he dejado es porque tras mucho pensar, no me parece para tanto.
A los que pensáis que he hecho mal siguiendo con la relación. Puede que tengáis razón, que ahora os diga que debo comprobarlo por mí mismo y que dentro de unos años os diga que me arrepiento, pero sentiría que soy injusto con un error que tiene solución. Al fin y al cabo, me he comportado como me gustaría que se comportasen conmigo al cometer un error.
Y sí, el problema aquí es que, a estas alturas, sigo pensando en lo que me parece bien o me parece mal cuando eso debería de estar claro. Que necesito vuestro baremo para tener claro el mío, pero veo que hay muchísimas cosas que no sé y que vosotros sí.
Con tantas dudas demuestro debilidad e inseguridad, espero que esto me sirva para corregir errores y no para tropezar con la misma piedra.
Y ante todo, muchas gracias (lo diré mil veces) por querer ayudar a alguien que lo necesitaba, por dedicar vuestro tiempo a un desconocido.
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